Tejiendo redes: estrategias para una efectiva aplicación de la IVE

El pasado 24 de enero, la Ley 27.610 de Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE) entró en vigencia y dio lugar a un reclamo histórico del colectivo feminista en la Argentina. Ahora, y siguiendo las declaraciones de médicas de todo el país, el próximo paso es aunar estrategias para lograr una efectiva aplicación de la normativa a lo largo y ancho del territorio nacional.

En una entrevista colectiva con Télam, profesionales de la salud de Córdoba, San Juan, Chubut, Jujuy, La Rioja, Buenos Aires y Tierra del Fuego compartieron los dos objetivos base para que la IVE sea respetada en todo el país. Según indicaron, planean trabajar para concientizar al sector y pensar estrategias y respuestas para impedir que la objeción de conciencia trabe el acceso al derecho que estipula la Ley 27.610.

Desde Córdoba reconocen que la IVE establece un nuevo derecho para las mujeres y las personas gestantes. En paralelo, en la Rioja señalan que además de un derecho es un respaldo para no volver a la clandestinidad. En función de observar a la Ley como un derecho y respaldo, en la provincia de Jujuy aseguran que ahora resta poner el foco en la información y la capacitación de los equipos de salud para respetar los derechos y las obligaciones.

También, en San Juan, Chubut y San Luis auguran con ansias la implementación en terreno de la normativa. Para ello, apostarán a reuniones y capacitaciones en la modalidad que la pandemia lo permita para trabajar en el protocolo de salud, la reglamentación de la Ley y el vínculo con las obras sociales. 

El gran comienzo: primera interrupción voluntaria del embarazo.

Tras entrar en vigencia la IVE, Estefanía Cioffi fue una de las primeras médicas en prescribir misoprostol a una paciente que solicitó el acceso a la práctica. La noticia se conoció rápidamente cuando la profesional manifestó en sus redes sociales que no fue otra receta más. 

Luego de compartir su felicidad, la médica reconoció que fue la primera vez que pudo acompañar a una mujer que solicita interrumpir un embarazo “sin pedir justificativos”. Al mismo tiempo, explicó que una vez finalizada la práctica un equipo interdisciplinario con médicos y psicólogos acompaña a la paciente.