Por qué liberaron al "Pata" Medina, exdirigente de la Uocra

El tribunal de La Plata decidió la excarcelación de Juan Pablo "Pata" Medina, exlíder de la Unión Obrera de la Construcción de la República Argentina (Uocra), quien había sido apresado por varios crímenes durante el gobierno de Mauricio Macri, en el año 2017.

El caso del referente de la Uocra no presentaría ningún motivo para extender la condena, ya que “carece de antecedentes penales", y además no habría "motivos fundados que justifiquen la presencia de peligro de entorpecimiento". Ante esta situación, fue liberado este jueves.

Sin embargo, el exdirigente de la unión obrera no podrá salir del país por tiempo indeterminado. Estuvo preso durante casi 4 años luego de ser condenado por lavado de dinero, entre otros cargos graves tales como la asociación ilícita, y más adelante también se le encontraron pruebas de extorsión.

El momento de su detención, según cuenta Infobae, es muy recordado debido a que el exlíder de la Uocra no se entregó fácilmente a la policía, sino que automáticamente se escondió en su casa, y se defendió de manera violenta para no quedar detenido.

Fuente: (TN)

En colaboración con su causa, una gran cantidad de afiliados de la Uocra intentaron evitar que su jefe fuera llevado por la policía, anteponiéndose a la entrada de su hogar. El "Pata" tenía una casa en Punta Lara, localidad balnearia ubicada dentro del partido de La Plata.

Pese a esta situación, la Justicia le concedió la prisión domiciliaria a principios del año 2020, luego de que el mismo la hubiera requerido. Uno de los puntos que ablandaron al tribunal tuvo que ver con la confirmación de que Medina contrajo coronavirus durante el periodo de aislamiento.

Al parecer, Medina también habría pergeñado varios hechos violentos contra personas vinculadas con su gremio, y que no estaban dispuestas a colaborar con sus proyectos, ni a seguir su voz dentro de la construcción. Hay varias denuncias en su contra, según las cuales habría ido a presionar a afiliados y a particulares.

Durante buena parte del gobierno macrista, la encarcelación de dirigentes afines al peronismo fue una característica del momento. De acuerdo a lo que pregonaban desde Cambiemos, la idea era terminar con la corrupción estructural de la República Argentina.