Manifestaciones en Casa Rosada y en la Quinta de Olivos

A pesar que ya empezaron a regir las restricciones a la circulación para frenar el avance del coronavirus, un grupo de manifestantes se presentó con bombos y platillos frente a la Quinta de Olivos y otro intentó ingresar a Casa Rosada en rechazo a las nuevas medidas implementadas por el Gobierno nacional.

La caravana llegó alrededor de las 20:00 horas a la residencia presidencial, luego de que comerciantes, padres y madres terminaran de manifestarse en el lugar por la limitación en el horario de los comercios y por la suspensión de las clases presenciales durante dos semanas.

Fuente: (Todo Noticias)

A diferencia de los vecinos que se manifestaron en la Quinta de Olivos y en Casa Rosada por la tarde, el grupo que llegó a la noche se movió a los empujones y a los gritos. Además, muchos de ellos no usaban barbijo y llevaban banderas amarillas con frases en negro y una serpiente cascabel que representa, según ellos, a los liberales.

El momento de mayor tensión se dio cuando este grupo anticuarentena fue desplazado unos metros por la Policía. A pesar de que se encontraban infringiendo el nuevo Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU), los manifestantes se quedaron en el lugar cantando el Himno Nacional para desafiar al Gobierno.

Mientras tanto, en Casa Rosada un grupo de manifestantes se trepó a la reja de la Casa de Gobierno y arrojó una valla metálica por encima de esa protección. Frente a esto, los bomberos arrojaron agua en un intento de dispersar a los protestantes, pero el enfrentamiento se mantuvo durante varios minutos hasta que culminó con seis detenidos.

“Mamá, fui yo”: la confesión del argentino que amenazó a la legisladora estadounidense

El 11 de diciembre del año pasado, desde una cuenta de la red social Parler, amenazaron a la legisladora estadounidense Alexandria Ocasio Cortez. En un posteo, un usuario aseguró que le quitaría la vida a Ocasio Cortez con sus “propias manos” porque era una “indocumentada”. Desde la misma cuenta también escribieron amenazas contra la “basura liberal” y la “elite”.

A partir de ese momento, la División de Operaciones Internacionales de la Oficina Federal de Investigaciones de Estados Unidos (FBI) comenzó una investigación que llegó hasta un IP argentino. Específicamente, se trataba de una dirección de red perteneciente a la empresa Telecentro, asociada a un teléfono nacional. El FBI envió el alerta a la Unidad Fiscal Especializada en Ciberdelincuencia (UFECI), liderada por Horacio Azzolin.

Acto seguido, la fiscalía dependiente de la Procuración General de la Nación presentó una denuncia que cayó en el juzgado de Ariel Lijo, quien dio intervención al Departamento Unidad de Investigación Antiterrorista (DUIA) de la Policía Federal.

Luego se realizar las diligencias correspondientes en páginas como Facebook, Google, Parler, Instagram WhatsApp y en compañías telefónicas de Argentina, se llegó hasta una casa de Burzaco, partido de Almirante Brown, provincia de Buenos Aires. En la misma, se encontró al autor del hecho, un joven de 24 años que, mientras la Policía estaba presente, le dijo a su madre: “Mamá, fui yo, soy un boludo”.