Las cuatro modalidades de clases presenciales que evalúa el Gobierno porteño

Estas ultimas 24 horas son decisivas para el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA). Ayer, el presidente de la Nación, Alberto Fernández, se reunió de manera virtual con gobernadores del centro y del sur del país, entre ellos estaban Axel Kicillof, en nombre del Gobierno bonaerense, y Horacio Rodríguez Larreta, por el Gobierno porteño. En el encuentro se analizó la situación epidemiológica y se evaluaron nuevas medidas de cara al vencimiento del Decreto de Necesidad y Urgencia. Una de ellas tiene que ver con la circulación vial: se acordó cerrar 25 accesos a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA), incrementar retenes y cerrar bocas de subte.

Lo que aún está en debate son las clases presenciales: la piedra de toque del conflicto entre el Gobierno porteño y el nacional. La Provincia de Buenos Aires presiona para que se cierren las aulas, considera que en este momento la virtualidad es la mejor opción. En cambio, la Administración que dirige Rodríguez Larreta pretende sostener, aunque sea en una mínima parte, la presencialidad.

En ese sentido, el Gobierno porteño analiza cuatro modalidades distintas para poder continuar con las escuelas abiertas en el marco de la segunda ola de coronavirus, que implicarán privilegiar ciertos niveles educativos y reducir el aforo en las aulas.

Primera opción

Una de las modalidades consta de una presencialidad solo para los niveles maternal, inicial, primaria, secundaria, para las prácticas del nivel superior y para los Centros de Educación Temprana (CATE), pero sólo los sábados. En tanto, la educación de adultos, la formación profesional, el superior universitario y no universitario en todas sus modalidades continuarían de manera virtual.

De esta manera, la Administración porteña estima que la movilidad educativa se reducirá en un 21%. Es decir, que se movilizarían 603.048 estudiantes, 152.658 alumnos menos que antes, y 325.099 pasajeros en el transporte público, 58.482 usuarios por debajo de de la cifra de presencialidad normal.

Segunda opción

La otra alternativa es la bimodalidad para estudiantes de mayor autonomía, que no necesitan de sus padres para completar el proceso educativo. Bajo este esquema tendrían clases presenciales los niveles maternal, inicial, primaria, las prácticas del nivel superior, y el CATE (sólo los sábados). En cambio, los alumnos del nivel secundario alternarían entre instancias presenciales y remotas. Finalmente, la formación de adultos, profesionales, el nivel superior universitario y no universitario en todas sus modalidades tendría clases virtuales.

Con esta modalidad, la CABA calcula una reducción en la movilidad educativa del 33%, con 506.634 alumnos yendo a clases, esto es, 249.072 menos que el total, y 277.527 usuarios utilizando el transporte público, 106.054 menos que en el esquema normal.

Tercera opción

El tercer escenario implica una reducción más drástica: solo tendrían clases presenciales los del nivel maternal, inicial, primaria y las prácticas del nivel superior. En tanto, el nivel secundario y el segundo ciclo de primaria tendría clases bajo la bimodalidad. Mientras que la formación de adultos, la profesional, el superior universitario y no universitario en todas sus modalidades funcionaría bajo la modalidad remota.

Este esquema implica una reducción del 55% en la movilidad, por lo que solo 425.437 estudiantes asistirían a las escuelas (330.269 alumnos menos) y 242.318 personas utilizarían el transporte público (141.263 pasajeros menos).

Cuarta opción

El ultimo esquema consta de una presencialidad para los niveles maternales, las salas de 5 años, 1°, 2° y 7° grado de primaria, 1° año de secundaria y CATE, con arreglo en los horarios de ingreso y egreso. A su vez, todos los demás niveles (educación de adultos, formación profesional, superior universitario y no universitario) tendrían clases de manera virtual. Esto quiere decir que las escuelas permanecerían abiertas solo para tareas pedagógicas y administrativas.

Esta opción implica reducir la movilidad estudiantil al 73%, con 205.536 estudiantes de forma presencial y 550.170 menos que en la presencialidad completa. En tanto, 84.296 pasajeros utilizarían el transporte público, unos 299.285 usuarios menos que en épocas normales.

La mejor manera de cuidarse

Ante el aumento de casos positivos de coronavirus, es necesario extremar los cuidados. Existen varias formas de evitar contraer la enfermedad, pero las más recomendadas son las siguientes: utilizar el barbijo de manera correcta (que cubra boca, nariz y mentón), mantener una distancia mínima de dos metros entre personas y lavarse las manos constantemente con agua y jabón. Además, es aconsejable evitar aglomeraciones y reuniones sociales.