Creer o reventar: el video de un lobizón que atemorizó a Bella Vista

El fin de semana largo transcurría normalmente, entiéndase por normal una Semana Santa en plena pandemia, en Lomas de Mariló, localidad bonaerense de Bella Vista, hasta que un aterrador video dejó conmocionada a la comunidad que no sabe si lo que vio es real o si se trataría de algún engaño.

La noche del Viernes Santo los perros estaban ladrando frenéticamente en Quirno al 5.000, una calle de tierra de la localidad de Bella Vista. “Los perros del barrio estaban aullando como locos", relató a un portal informativo Brian, uno de los residentes de la zona.

Es que las imágenes son aterradoras. Una especie de bestia cuadrúpeda habría salido de entre los arboles y, a pesar de que un perro le ladra ininterrumpidamente, el espécimen habría caminado cual cangrejo y, sin prestarle atención al animal doméstico, habría continuado avanzando hasta desaparecer de cuadro.

Fuente: (Jamsis 498)

Toda la secuencia habría sido captada por una cámara de seguridad de la localidad bonaerense que pertenece a un vecino que vive frente a un club de polo con un amplio predio y una zona descampada.

Muchos vecinos de Bella Vista han quedado atemorizados por la criatura que, de acuerdo con los relatos locales, se trataría del lobizón, el séptimo hijo varón que, si no es apadrinado por el presidente de la Nación, se convierte en una especie de lobo los martes y viernes por la noche.

Tal fue el terror infundido por el episodio paranormal que algunos maestros del jardín zonal estarían pensando en llevar un cura para que “bendiga” la zona y evite así que vuelva a aparecer el espécimen.

El mito del lobizón y la ley nacional

El lobizón es uno de los siete monstruos de la mitología guaraní. Según la leyenda, se trata del séptimo hijo de Tau y Keraná. Tau era un espíritu que se enamoró de la doncella Keraná. Para conquistarla, el espíritu se transformó en un hermoso joven que durante siete días seguidos visitó a la doncella.

Tau, al ver complicado sus planes, raptó a la joven y dejó subsumida en una enorme tristeza a la tribu. Tal fue el dolor que Angatupyry (espíritu del bien) lanzó una terrible maldición sobre la pareja: solo parirían monstruos.

Todos sus hijos fueron sietemesinos y el séptimo hijo se convirtió en una criatura mitad hombre y mitad bestia, aborrecida y temida por las tribus guaraníes.

El mito es especialmente popular en Argentina. De hecho, desde 1907 los presidentes del país apadrinaban al séptimo hijo de las parejas para evitar, por un lado, que el niño se convirtiera en lobizón y, por otro, que los padres le quitaran la vida frente al temor de que su descendiente se convierta en una vil criatura.

El 12 de marzo de 1973, el presidente Juan Domingo Perón dio formato legal a dicha costumbre a través del Decreto número 848, conocido como Ley de Padrinazgo Presidencial. Además de quitarle la maldición, la normativa le otorga becas totales para estudios primarios y secundarios al apadrinado. Creer o reventar, se trata de una de las leyendas más conocidas a lo largo de todo el territorio nacional.