ECONOMÍA
BCRA: cómo funcionan las tarjetas de débito e inversiones a largo plazo autorizadas para adolescentes
Las entidades financieras trabajan en promover la educación financiera y la inclusión temprana.
Obtener una tarjeta de débito con menos de 18 años de edad es posible y las autoridades del BCRA (Banco Central de la República Argentina) buscan que cada vez más jóvenes inicien una formación saludable en términos económicos.
Las tarjetas de débito son una herramienta básica en la inclusión financiera, para lo que se necesita educación y la adquisición de conceptos básicos. Por mucho tiempo, el uso de este instrumento estuvo regulado por los padres de familia, pero esto cambió.
Los adolescentes pueden optar por una tarjeta de débito que le facilite el acceso a su caja de ahorro, según la entidad a la que se aboquen. Quienes tienen entre 13 y 17 años pueden optar por la titularidad sin necesidad de estar autorizados por un mayor de edad.
Según el BCRA, la apertura de cuenta puede ser de forma presencial o virtual, aunque esta tendrá que ser en pesos, no tendrá costo por mantenimiento y tampoco se cobrará el uso de cajeros automáticos.
La caja de ahorro estará asociada a una tarjeta de débito que facilitará la extracción de dinero, realizar compras en comercios que otorgan el servicio, hacer transferencias y pagos a través del home banking y acceder a códigos QR, entre otros.
Los más jóvenes no solo pueden acceder al uso del plástico, sino también algunas entidades como el BBVA Banco Francés o el Banco Macro disponen de un instrumento de ahorro a largo plazo. Lo mismo ocurre en el Banco Nación, Supervielle, Credicoop, Itaú y HSBC.
Hay límites para los más jóvenes
El manejo de depósitos y transferencias en el Banco Nación tiene un límite para los más pequeños, se les permite utilizar hasta un Salario Mínimo Vital y Móvil por mes. En el momento que se activa la cuenta se puede habilitar la inversión a plazo fijo UVA o tradicional.
La entidad financiera ofrece una tasa de interés del 39% anual en el plazo fijo tradicional con un mínimo de 30 días y en el UVA, una unidad con valor determinado que actualiza el BCRA a diario.
Cuando se elige el plazo, que debe ser como mínimo de 90 días, se recibe el valor de la inversión actualizada de acuerdo a la inflación registrada en ese período y a eso se le suma el interés anual.
