Inflación: en octubre una familia necesitó $139.738 para no ser pobre

De acuerdo con el INDEC (Instituto Nacional de Estadísticas y Censos), en octubre la canasta básica alimentaria aumentó 9,5% a causa de la inflación, lo que significa que una familia compuesta por dos adultos y dos menores necesitó ingresos por $62.105 para no ubicarse en situación de indigencia.

Asimismo, ante el aumento en el índice de precios, una familia de cuatro integrantes necesitó $139.737 para no caer por debajo de la línea de la pobreza, pues por la inflación la canasta básica total aumentó 9%.

Esto significa que, por los efectos de la inflación, la canasta básica total aumentó un 88% hasta octubre y en los últimos 12 meses subió 100,8%, mientras que la canasta básica aumentó 93,1% en el último año. Cabe recordar que la canasta básica total no incluye lo que se paga por vivienda.

En términos comparativos, una familia de cuatro integrantes (dos menores y dos adultos) necesitó en octubre de este año el doble de ingresos que hace un año, pues en octubre del 2021 el mismo grupo familiar necesitó $30.925 para no caer en situación de indigencia.

En cuanto a la canasta básica total, durante el mismo periodo el año pasado una familia necesitó $72.365 para estar por encima de la línea de pobreza, mientras que hoy se necesita casi el doble de ese valor.

Las dramáticas cifras evidencian lo duro que impacta la inflación sobre los ingresos de los ciudadanos y cómo el salario mínimo resulta ser insuficiente para cubrir los gastos básicos de una familia, pues en octubre el salario se ubicó en $54.550.

Es decir, que si en un hogar solo se percibe este ingreso, hicieron falta $7.555 para cubrir la canasta básica. Mientras que para pagar la canasta básica total (sin vivienda), les faltaron $85.187, más del doble de un salario mínimo.

Qué pasará con la inflación en los próximos meses

Si bien en octubre el índice de precios fue menor a lo esperado (6,3%), analistas aseguran que en lo que queda del año la tendencia seguirá alta, con un piso por encima del 6%, por lo que se proyecta un acumulado anual de 100% o más.

En tanto, los precios aumentaron 76,6% en los primeros 10 meses del año, mientras que en términos interanuales, la suba alcanza 88%, la cifra más alta de las últimas dos décadas.