El Gobierno pone en marcha seis medidas para evitar las manifestaciones de movimientos sociales

Los movimientos sociales nucleados en la Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP) decidieron cambiar la consigna de sus marchas, que en primera instancia consistía en pedir frente a supermercados y empresas alimentarias, justamente productos alimenticios, a luchar contra la especulación y formadores de precios. Esto ocurre luego de que desde el Gobierno se lanzaran seis ejes que beneficiarán a dichos movimientos sociales.

Victoria Tolosa Paz, ministra de Desarrollo Social, logró cambiar el objetivo de la marcha, que en principio era parcialmente contra el Gobierno del Frente de Todos (donde también tienen representación los movimientos sociales), al firmar una serie de medidas, sin la participación de los movimientos de izquierda, entre ellas, que se otorgará un bono que se acerca a la mitad de un Salario Social Complementario.

Entre las medidas adoptadas por el Gobierno se aprecian la compra de bolsones de frutas y verduras que sean producidas exclusivamente por cooperativas agrarias cada mes, pago de la totalidad de los expedientes que contemplan la compra de herramientas y máquinas, nueva reglamentación del Potenciar Trabajo y la entrega de materiales para confeccionar guardapolvos en cooperativas textiles.

Dina Sánchez, secretaria adjunta de la UTEP y del Frente Popular Darío Santillán, dijo: “Llegamos a este fin de año con profunda pobreza y sueldos de miseria. Las políticas del Gobierno no llegan a los de abajo. Hay crecimiento, pero se lo quedan cuatro vivos. Los formadores de precios son los principales responsables de la inflación hoy en Argentina”.

Entrega de viviendas en Chaco

En la provincia de Chaco, el pasado sábado, se entregaron 43 viviendas sociales en Resistencia y Puerto Vilelas. Estas casas fueron construidas por movimientos sociales reunidos en cooperativas de construcción en el marco de las políticas de la economía popular de la provincia.

La iniciativa del programa estatal tiene como misión construir 5.000 viviendas y dar empleo a cerca de 10.000 personas. Entre la infraestructura que contempla el proyecto, se tiene la urbanización complementaria como apertura de calles, veredas, provisión de agua potable, cloacas, alumbrado público y energía eléctrica.