Desde hoy la Policía de la Ciudad comienza a usar las pistolas taser

Tal y como se anunció semanas atrás, desde este lunes, 17 de julio, la Policía de la Ciudad comenzará a usar las pistolas taser en las estaciones de subte, centros de transbordo y en las 15 comunas porteñas.

La implementación del sistema arrancará con 60 dispositivos que fueron asignados de manera estratégica a la División de Intervenciones Rápidas (DIR). Además el personal de la División Subtes e integrantes del grupo especial División de Operaciones Especiales Metropolitanas (DOEM) también contará con pistolas taser.

Según informó el Gobierno de la Ciudad, los efectivos dotados con las pistolas taser recorrerán las seis líneas del subte, especialmente las estaciones Carlos Pellegrini, J. M. De Rosas, San Pedrito, Congreso de Tucumán, Hospitales, Retiro y Virreyes. Asimismo, ya fueron desplegadas las cápsulas del DIR que cubrirán las 15 comunas de la Ciudad.

Al respecto, Eugenio Burzaco, ministro de Justicia y Seguridad de la Ciudad, afirmó que “el objetivo es dotar de más herramientas a nuestros policías para la reducción y detención de personas que atacan con elementos cortantes, y de esa manera contener a la persona sin peligro para ella o terceros”.

Además explicó que "se va a trabajar en binomios, en los que un oficial disparará y el otro oficial tendrá la tarea de reducir al agresor, que es la mecánica que se utiliza en todo el mundo y hemos traído acá".

Cabe recordar que todos los efectivos que usarán los dispositivos fueron previamente capacitados en el Instituto Superior de Seguridad Pública de la Ciudad. En total serán 250 policías los que saldrán a las calles con la nueva dotación.

Asimismo, se estableció “un protocolo de uso con el objetivo de garantizar una respuesta proporcional a las situaciones de agresión, además cada oficial estará acompañado por un compañero armado con un arma de fuego convencional”, según detalló el Gobierno.

Cómo funcionan las pistolas taser

Los nuevos dispositivos envían una descarga eléctrica de 400 volts durante cinco segundos, a través de dardos que permiten inmovilizar a personas violentas o en estado de desequilibrio sin causarles daño permanente.

Estas armas de baja letalidad, además graban toda la secuencia de uso, en imágenes y en audio, por lo que después puede verificarse las condiciones de tiro a fin de evitar un mal manejo de los dispositivos.