Los motivos que llevaron al Gobierno Nacional a frenar el tarifazo de mayo
El Gobierno Nacional postergó algunos alimentos para el mes siguiente.
En un contexto económico desafiante, el Gobierno Nacional tomó la decisión de postergar los aumentos previstos en los precios del combustible, gas y luz que estaban programados para el mes de mayo.
Esta medida del Gobierno Nacional, que busca frenar la inflación y aliviar la carga sobre los consumidores, ha generado diversas reacciones en la sociedad y plantea interrogantes sobre el futuro de la política energética del país.
El anuncio oficial, que se realizó a través de un comunicado del Ministerio de Economía, indica que la actualización del impuesto a los combustibles y al dióxido de carbono, así como los incrementos en las tarifas de gas y electricidad, se diferirá hasta el 1° de junio de 2024.
Esta postergación, que se dio a conocer luego que la ley de bases recibiera media sanción, se presenta como una estrategia para proporcionar estabilidad al sector y evitar subas adicionales en los precios durante un mes crítico para la economía nacional.
La decisión de aplazar los aumentos se tomó luego de un análisis detallado del impacto que estos tendrían sobre la inflación, que sigue siendo una de las principales preocupaciones del gobierno. En un esfuerzo por consolidar la baja de la inflación y mantener el superávit fiscal, el gobierno optó por esta medida cautelar.
Los entes reguladores, Enargas y ENRE, no publicaron los nuevos cuadros tarifarios, lo que indica que la postergación fue una decisión de última hora. Los aumentos que se han pospuesto incluyen un 10,69% para las distribuidoras eléctricas, 12,5% para las distribuidoras de gas y 12% para las transportistas de gas.
Combustible
En cuanto a los combustibles, la actualización correspondiente al cuarto trimestre de los Impuestos sobre los Combustibles y al Dióxido de Carbono también se ha retrasado. La medida ha sido recibida con alivio por parte de los consumidores, quienes enfrentan una presión económica constante.
Sin embargo, también ha suscitado preocupación entre las empresas del sector energético, que ven en la postergación una señal de incertidumbre sobre la normalización de las tarifas y la sostenibilidad financiera a largo plazo a la cual acudió el Gobierno nacional.
