Alberto Fernández, cada vez más complicado con el escándalo de los seguros
Alberto Fernández, sin poder salir del país.El reciente rechazo del pedido de Alberto Fernández para apartar al juez Julián Ercolini del caso conocido como el “Escándalo de los seguros” ha generado un gran revuelo en el ámbito político y judicial de Argentina. Este caso, que involucra acusaciones de defraudación al Estado, ha sido una fuente constante de controversia y debate.
El pedido de recusación fue presentado por la defensa del ex presidente Alberto Fernández, quien argumentó que existía una enemistad manifiesta entre él y el juez Ercolini. Según el ex presidente, esta enemistad se originó a partir de una relación personal que ambos mantuvieron en el ámbito académico de la Universidad de Buenos Aires.
Además, Fernández alegó que durante su mandato presidencial había ordenado una denuncia contra Ercolini por un viaje realizado con ejecutivos de una empresa a la Patagonia, lo que, según él, podría influir en la imparcialidad del juez.
Sin embargo, la Sala IV de la Cámara Federal de Casación Penal, a cargo del juez Gustavo Hornos, rechazó este pedido. En su fallo, Hornos argumentó que no existían pruebas suficientes que demostraran una parcialidad por parte de Ercolini.
Además, señaló que la relación personal mencionada por Fernández no había sido probada de manera concluyente y que el juez Ercolini había negado cualquier tipo de prejuicio hacia el ex presidente.
El “Escándalo de los seguros” se refiere a una serie de irregularidades detectadas en la intermediación de seguros durante la gestión de Alberto Fernández. Según una auditoría realizada por el gobierno de Javier Milei, se encontraron múltiples irregularidades en la contratación de pólizas de seguros por parte de organismos del Estado.
Normativa
La normativa vigente durante el mandato de Alberto Fernández obligaba a estos organismos a contratar sus seguros a través de Nación Seguros, una subsidiaria del Banco Nación, pero permitía la intervención de brokers privados que cobraban comisiones.
La defensa de Fernández ha sostenido que estas acusaciones son infundadas y que forman parte de una persecución política en su contra. Sin embargo, la decisión de la Cámara de Casación Penal de mantener a Ercolini al frente del caso ha sido vista como un revés significativo para el ex presidente.