Los tres jugadores que Gallardo convocó para entrenar este domingo, y los motivos

El pasado lunes River -como la mayoría de los clubes de la Liga Profesional- reanudó las actividades y volvió a los entrenamientos. Mientras el plantel tuvo el domingo libre, Marcelo Gallardo convocó a tres jugadores para trabajar en Ezeiza.

Se trataba del primer día de descanso desde que se retomaron los ensayos, pero el Muñeco prefirió que Juan Fernando Quintero, Robert Rojas y Matías Suárez asistieran al complejo y trabajaran bajo las órdenes del preparador físico.

¿Una especie de sanción o castigo disciplinario impuesto por el DT del Millo? Nada de eso. El motivo por el que los futbolistas se presentaron a las 10 en el River Camp es para recuperar ritmo y ejercitarse ya que, por diversas razones, fueron los últimos en integrarse al grupo y se habían perdido algunos días.

El delantero cordobés se sumó el jueves, mientras que el colombiano lo hizo el viernes y el paraguayo hizo lo propio recién el sábado. Todos se retrasaron debido a que tuvieron que cumplir con respectivos aislamientos obligatorios. Ante esto, Gallardo los quiere poner a tono cuanto antes.

No se trata de un capricho del entrenador de 44 años. Si bien todos los players volvieron bien en cuanto al estado físico, para el técnico resulta clave agarrar continuidad con la pelota antes de las competencias oficiales. Hubo una merma demostrada por los equipos que volvieron a tener rodaje oficial.

En este caso, los tres integraron el único grupo que practicó en Ezeiza, mientras que durante toda la semana el plantel se dividió en tres tandas y tres turnos diferentes para cumplir con los protocolos sanitarios. El objetivo del ex DT de Nacional: la Copa Libertadores.

Faltan 32 días para el cruce ante San Pablo en el Morumbí por la tercera jornada del Grupo D. Menos de una semana después, el equipo del Muñeco se presentará en Perú para medirse ante Binacional. Es por eso que cada minuto cuenta y en la Banda no quieren perder días.

Cabe señalar que el entrenador de River estará expectante de lo que ocurra en la semana con el caso Quintero-Shenzhen. Los chinos (que ofrecieron 10 millones de euros rápidamente rechazados por la dirigencia) volverían a la carga con una propuesta superior, y todo dependería del enganche y su deseo o no de emigrar.