CANTANDO 2020
Más aislados: la frivolidad del "Cantando 2020" sale a la luz con esta maniobra de LaFlia
Marcelo Tinelli se resiste a parar el show.Cuando las normas eran para todos las mismas, las cosas estaban en orden, pero cuando los privilegiados volvieron a levantar la cabeza con excusas absurdas, la realidad cambió y el "Cantando 2020" volvió a sumar posibles casos de coronavirus.
Marcelo Tinelli no soportó, como el común de la gente, parar la máquina y resguardarse del virus, y como el conductor parece tener coronita, rápidamente consiguió un permiso para lanzar el certamen con unas modificaciones.
En vez de la competencia de baile a la que tiene acostumbrados a sus fans, tuvo que presentar una de canto, donde, con la excusa de ser una fuente de trabajo, contrató a unos cuantos artistas anónimos y a una tracalada de famosos.
Allí, donde prima la polémica y el riesgo a contraer la enfermedad, se prioriza el show, los puntos de rating y, sobre todo, facturar. Pero el dueño del circo ni pisa la empresa: dejó el programa en manos de Ángel De Brito, Laurita Fernández y compañía.
Ahora que comenzaron a caer como naipes de un castillo los posibles infectados, el concurso televisivo saca a la luz la forma más frívola que eligen los empresarios para que todo el sistema, su sistema, siga funcionando.
Literalmente reemplazan como si nada a los enfermos por sanos. En la primera ronda, salió Florencia Torrente; luego fue el locutor del campeonato, Martín Salwe. Ahora por contacto estrecho se aislaron Lizardo Ponce, Adabel Guerrero y Lourdes Sánchez.
Como quien dispone de muchos caballitos de batalla, LaFLia, la empresa que produce el programa de Tinelli, acomodó a Paula Trápani, que ya cubre a Torrente, y a Carolina Molinari como reemplazo de los conductores de "La Previa".
Mientras tanto, Andrea Taboada cubre al locutor de la contienda. Por otro lado, otro de los contagiados es Fredy Villarreal, que acompañó a a Alex Caniggia en la gala de tres. Cabe recordar que compartió una reunión con el Marcelo Tinelli recientemente. ¡Ojo!