“La vergüenza de contarle al doctor”: Guido Kaczka revivió un insólito accidente

Guido Kaczka se destaca en El Trece por siempre tener una anécdota debajo de la manga. La de anoche causó la carcajada de los participantes y del locutor de “Bienvenidos a bordo”. 

La de ayer tuvo como protagonista a un gas pimienta el cual fue un regalo de su hermano. A pesar de los años que pasaron, el famoso conductor no logra sacarse esta accidentada historia de la cabeza. 

Kaczka contó que siempre lo llevaba en la guantera del auto y una vez, llevando a una compañera le quiso mostrar cómo funcionaba. Lo cierto es que era un producto extranjero y por eso su intriga. 

Ella iba a girar el sistema de seguridad y yo le dije no pará, yo te muestro. Abro la ventanilla y le digo girás el pestillo y tirás. Todo mientras iba manejando.  

El viento me lo trae a mí, cuando lo siento la miro y le digo uy, me mojé. Porque no sentí nada, pero en un momento me empieza a agarrar picazón. 

Ante la imposibilidad de seguir, el reconocido conductor terminó en el Instituto Oftalmológico Pedro Lagleyze, donde se ruborizó aún más al tener que contar cómo sucedió el hecho. 

Por lo que el protagonista de “Rincón de luz” expresó: “Después vino la vergüenza de contarle al doctor cómo es que tenía yo el problema que tenía”.  

Una vez que Guido Kaczka fue atendido, le pusieron algodón en sus ojos con algún tranquilizante. Sin lugar a dudas, una anécdota dolorosa, pero muy graciosa.