El padre de Britney Spears aseguró que ha tenido un buen manejo sobre la fortuna de su hija

La semana pasada Britney Spears denunció ante los tribunales correspondientes que su padre había puesto a un gerente comercial al mando de sus negocios, sin antes consultarle.

La cantante tiene meses pidiendo a la justicia que su progenitor, Jaime Spears, deje de ser el encargado de llevar su curatela, ya que no han logrado entenderse muy bien los últimos años.

Ayer TMZ reseñó todo lo que el señor Spears dijo en la Corte para respaldar sus 12 años como administrador de la fortuna de la artista, con la intención de mantener su puesto.

El padre de Britney aseguró que ha manejado de manera eficiente y hábil el patrimonio de 60 millones de dólares, sobre el cual ella no ha tenido ningún tipo de decisión desde el 2008.

De igual manera, Jaime afirmó que su gestión ha sido buena, ya que las deudas y demandas han sido trabajadas de la mejor manera, haciendo que en la actualidad no exista nada para que la princesa del pop lo acuse de mal manejo.

Sobre su decisión de poner a Michael Kane, de "Miller Kaplan", como gerente comercial de Spears, dijo que surgió la necesidad ante la renuncia de la persona que estaba anteriormente en el puesto, quien abandonó el trabajo por fuertes amenazas.

Por otro lado, el papá de la estadounidense aseguró que no debe rendirle cuentas de nada al nuevo abogado de su hija, Sam Ingham, quien fue el que pidió formalmente a la Corte que lo destituyeran, ya que él no tiene nada que ver con la curatela.

En nombre de la estrella de la música, Ingham aseguró la semana pasada que su padre presentó a Michael Kane como "un nuevo guardián que, sin duda, tiene una relación de trabajo importante con el equipo legal de (Jamie)" lo que podría representar un conflicto de intereses.