La presencia paranormal que alteró la tranquilidad de Emilia Attias

Son varias las figuras que a lo largo de los años se han convertido en noticia por misteriosos hechos que lograron acaparar la atención de la prensa y de los curiosos gracias a un halo de misterio y de situaciones poco claras. Tiempo atrás, Emilia Attias tuvo su momento de ser centro de las miradas de varios creyentes de lo paranormal.

Corría el año 2008 cuando Emilia Attias contrató a un grupo de arquitectos para que haga refacciones en la casa familiar en Palermo, donde en la actualidad vive uno de los hermanos de la actriz. Durante su paso por el inmueble, los expertos en remodelado se encargaron en tomar fotografías de los ambientes para así evaluar los cambios que se podían llevar adelante.

En medio de esta situación, la pareja a cargo de las refacciones en la propiedad de Emilia Attias quedó pasmada ante un inesperado acontecimiento. Los profesionales notaron que en una de las fotografías había una presencia más que peculiar. En la imagen se veía un nene levitando en ropa interior mientras hacía una morisqueta detrás de la puerta de un ropero. Cuestión de creer o reventar.

La trágica hipótesis

Ante la revelación de semejante enigma, la actriz protagonista de "Casi Ángeles" y su familia no comprendían quién podría ser el niño, hasta pensaron que era una obra de Photoshop de los trabajadores de la obra.

Lo que finalmente despertó suspicacias entre los Attias fue el sorprendente testimonio de una vecina, quien le comentó a la matriarca de la familia que los viejos habitantes de la propiedad palermitana habían sufrido ahí mismo la pérdida de su pequeño hijo en un accidente.

"Una vecina le contó a mamá que algunos años antes en esa casa había muerto un nene. El nene estaba ahogado y se lo encontró con la lengua afuera", reveló la actriz en una entrevista en "Pura Química". Desde la familia se comentó que contrataron a un curandero para que inspeccione la casa, pero el constructor que siguió trabajando allí aseveró que hasta sintió al niño correteando por las habitaciones mientras él se encontraba haciendo su labor.

Tiempo después, Emilia Attias explicó que su hermano, quien reside en la propiedad, no escuchaba nada de lo que se decía ni sintió nada extraño en su casa y lejos quedaron las presunciones del posible fantasma.