Así lograrás que el perejil se mantenga fresco por más tiempo

Las hierbas aromáticas se convirtieron en un ingrediente indispensable en la cocina, ya que no solo se encargan de transformar las recetas más clásicas, sino que también intensifican los sabores naturales de los alimentos y le añaden una fragancia irresistible a la comida. Sin embargo, algunas especies como el perejil no suele aprovecharse al máximo, porque la mayoría de las personas no llegan a consumirlo antes de que adquiera un aspecto viscoso y marrón.

Para que esta planta culinaria se mantenga fresca por más tiempo, los expertos en gastronomía aseguran que la clave se encuentra en el método que se utiliza a la hora de almacenarla. Por esta razón, existen algunos métodos fáciles que todo el mundo puede empezar a implementar en la comodidad del hogar.

El primer truco consiste en envolver el perejil en un repasador finito, limpio y húmedo. Una vez que se cubre por completo, se llevará a la heladera y se utilizará las veces que sea necesario (es importante asegurarse de cubrir correctamente los extremos).

Para llevar a cabo con éxito este procedimiento, los cocineros profesionales recomiendan hacerlo apenas se compra la hierba aromática o, en el caso de contar con una huerta en casa, a partir de momento en el cual se retira de la planta.

Existe un método que se utiliza con los ramos de flores y también puede ser de gran utilidad a la hora de mantener el perejil fresco por más tiempo. Básicamente, se trata de recortar ligeramente los tallos y colocar la hierba aromática en un recipiente repleto de agua. A continuación, sin emplear mucha fuerza, cubrís el bol con una bolsa de plástico y lo trasladás a la heladera. Deberías cambiar el líquido cada dos días o desde que empiece a verse sucio.

También podés congelar las hojas de esta hierba aromática, siempre y cuando sigas este procedimiento: lo primero que tenés que hacer es lavarlas y dejar que se sequen; una vez que esto ocurre, las vas a colocar en una bandeja con algunos cubitos de hielo, agua y aceite de oliva.

Aunque este método permite que el perejil esté en un estado perfecto para utilizarse en sopas o salsas, es importante tener en cuenta que no es el ideal para decorar, ya que su textura se pone muy blanda.