A prueba de lágrimas: aprendé cómo cortar una cebolla sin llorar

En el mundo de la gastronomía, existen algunos alimentos que son indispensables y siempre ocupan un lugar especial entre los platos favoritos de las personas: uno de ellos es la cebolla. A pesar de que la mayoría de la población disfruta del sabor que le añade esta hortaliza a las comidas, son pocos los valientes que logran aguantarse las lágrimas al manipularla.

Para ahorrarse un mal momento, los chef profesionales cuentan con una serie de consejos que ayudarán a cortar este bulbo subterráneo sin llorar en el proceso.

Uno de los primeros factores que se deben tener en cuenta al cortar una cebolla es elegir los utensilios de cocina correctos. Los expertos en gastronomía aseguran que un cuchillo bien afilado es indispensable, ya que dañará en menor medida las paredes celulares y liberará una cantidad reducida de las partículas que se encargan de irritar los ojos.

Una vez que se divide a la mitad esta hortaliza, lo mejor es colocarla boca abajo para que no se esparza por el aire una serie de reacciones químicas que son las responsables de que las lágrimas caigan con mayor facilidad.

Una vez que se corta la cebolla como indica la receta, resulta de gran utilidad colocarla en un recipiente y alejarla del espacio donde se está cocinando hasta el momento en el que sea necesario utilizarla.

Otro truco que puede ser de gran ayuda consiste en colocar la hortaliza en la heladera durante algunos minutos para que baje su temperatura y se enfríe por completo. Evita que se congele, ya que la consistencia final será más blanda de lo esperado y no es lo que se busca con esta pequeña ayuda.