Aprendé cómo utilizar fibra de coco en el jardín

Tanto los principiantes en la jardinería como los cultivadores hidropónicos y dueños de viveros comerciales están incluyendo la fibra de coco entre sus mejores productos para las plantas. Parte de su reciente popularidad se debe a su sostenibilidad, beneficios y similitud con el suelo y la turba.

Con el paso del tiempo, este sustrato natural logró conquistar el mundo de la horticultura, posicionándose como un medio de cultivo muy eficiente y amigable con el medio ambiente.

Fuente: (VIVEROS MOGAN) 

La fibra de coco se fabrica gracias a un proceso de fermentación que permite descomponer de forma natural la pulpa de la cáscara para luego aplicar distintas técnicas mecánicas que ayuden a desfibrarlo y embolsarlo como mulch suelto (aunque es más probable encontrarlo en forma de ladrillo o discos macizos).

Una vez que se procesa y seca, el bonote está listo para comercializarse en las tiendas de jardinería y utilizarse tanto en las plantas de interior como exterior. 

Para las personas que no quieren utilizar turba en su jardín la fibra de coco se convirtió en la alternativa perfecta. Una vez que se coloca en la tierra, permite que los intervalos entre riegos sean más largos, gracias a la excelente capacidad que tiene este material para retener el agua.

El bonote también mejorará naturalmente el drenaje de las plantas y mejora la humedad, esta característica es ideal para quienes viven en áreas lluviosas.

Los expertos en botánica recomiendan mezclar tierra arcillosa con este sustrato natural antes de colocarlos en el suelo, ya que creará una textura más clara, que permitirá que las raíces se arraiguen y prosperen.