Un espectáculo natural único: los túneles de hielo en las cercanías de Esquel

Son una obra maestra de la naturaleza que se da durante unas pocas semanas de enero y febrero en un cerro cercano a Esquel. Son los túneles del cerro La Torta, un laberinto con paredes de hielo que se forman espontáneamente.

La propuesta atrae a miles de turistas que realizan la travesía, primero en 4x4 y luego a pie, para ingresar a esta postal única en el mundo y elegida por viajeros y fotógrafos de naturaleza.

Este fenómeno, que se da en cercanías de la localidad chubutense, es una forma en hielo con cerca de 100 metros de largo y 10 metros de ancho, lo que permite que los turistas puedan recorrerlo y disfrutar.

Los túneles se forman cada año y esto se da merced al agua y nieve que se acumula al pie de una cascada y que empieza a derretirse con el calor del verano. Lo llamativo es que, como ese hielo está al reparo del sol, sufre un descongelamiento inverso, es decir, de adentro hacia afuera, por lo que se forman esta bóvedas.

El paseo se inicia en la ciudad de Esquel y desde allí hay que trasladarse 50 kilómetros por un bosque de lengas, en camionetas 4x4. A continuación, tras una hora de trekking, se bordea el arroyo Irigoyen y, más adelante, se arriba a la cascada de 45 metros de altura.

Los túneles del cerro La Torta están a 1.900 metros sobre el nivel del mar. Y desde allí se puede obtener además un vista preferencial para contemplar el Parque Nacional Los Alerces.

Ciudad hospitalaria

Además, Esquel ha sido premiada con un galardón que enorgullece a la comunidad. Y es que fue elegida como uno de los destinos más hospitalarios del país. Así se dio a conocer durante este año, cuando se anunció que esta ciudad, junto con El Chaltén y El Calafate, está en top 3 del sur argentino, como la más amigable con la comunidad viajera según un relevamiento de Booking.com, el célebre buscador de viajes.