La huella de Diego Maradona en la vida de Graciela Alfano, contada por ella: "No me lo saqué nunca"

Dueño de una vida admirada por todo el mundo, con una fama inmensa y eterna, Diego Maradona sigue siendo protagonista de infinitas mesas de debate aún hoy, a poco más de tres meses de su partida. Recientemente, la famosa recordó su amorío con el astro del fútbol que dejó una huella imborrable en el planeta.

Graciela Alfano estuvo dialogando en el programa radial Enganche y se refirió a su historia con Diego, cómo lo conoció, cuándo y qué pasó después. Siempre sin filtro, sin cuidados y brindando detalles en demasía, la actriz recordó al deportista más querido y reveló algo inusual.

Según la actriz teatral, conoció a Maradona cuando él tenía veintidós años y ella apenas catorce, desde entonces escuchó hablar del Diez con admiración y profundo cariño. En su testimonio agregó que incluso su padre lo apodaba de una manera distinta.

“Mi papá lo llamaba 'Maravilla Maradona'”, contó Graciela y de inmediato agregó: “Yo lo miraba y me preguntaba por qué le dirán ‘Maravilla’ y al verlo hacer jueguitos pensé: 'No puede ser, tiene una mano en el pie'”. De esa forma quedó obnubilada por Diego. Tiempo después la historia avanzaría más.

Alfano contó que luego Maradona viajó a España y que durante una entrevista confesó que estaba enamorado de una actriz argentina, la sorpresa al escuchar su nombre la dejó en un estado de éxtasis. “Le preguntaron si le había tomado la iniciativa y él, pudiendo mentir, dijo la verdad, que no. Después nos vimos infinidad de veces", aseguró ella.

De hecho también recordó un regalo destacado que le hizo Diego en un cumpleaños y que aún hoy lo conserva y usa: "Me regaló un brillantito divino. A mí no me gustaba que me regalaran cosas y él me preguntaba si lo usaba” y, con mucho respeto, Alfano le contestó a Maradona en ese entonces: “Le dije que lo acepté porque soy educada”.

Un día me lo puse y no me lo saqué nunca más, lo tengo puesto en este momento, me recuerda mucho a él.