Tarantela de manzanas: cómo elaborar el postre fusión más popular

Clásico de panaderías y pizzerías porteñas, la tarantela de manzanas es uno de los postres típicos de la gastronomía local. Aunque, por su nombre, puede pensarse que es una variedad dulce traída de Italia, algunas teorías demuestran que habría sido mérito de la creatividad de unos y otros.

La historia relata que efectivamente el postre fue creado por inmigrantes italianos, que habían llegado de Génova y se instalaron en La Boca. Y se llamó Tarantela ya que, una vez cocinado, parecía moverse de manera inestable, como si estuviese bailando este ritmo típico del país natal.

Son muchas las recetas que circulan de este postre a base de la popular fruta, aunque la que propone el pastelero Osvaldo Gross es una de las más ricas y contundentes. Para esta preparación se necesitará 150 gramos de azúcar, 100 gramos de crema de leche, 8 huevos, 20 rodajas de pan lactal, 600 gramos de manzanas tipo Deliciosas y 150 gramos de manteca.

Para iniciar la elaboración de la tarantela se deberá cortar y sacar el borde a las rodajas de pan y untar cada una de ellas con manteca que debe estar blanda, tipo pomada. Por otro lado, mezclar los huevos con la crema de leche y el azúcar y reservar. Cortar las manzanas en rodajas bien finas.

Paralelamente se deberá preparar un molde de budín inglés con caramelo líquido y sobre este ir colocando una capa de pan y otra de manzanas. Luego, agregar con cucharón la mezcla con huevos, que servirá para ligar.

Seguir colocando en forma alternada el pan, las manzanas y el ligue hasta cubrir totalmente con una capa de pan con manteca untada en su superficie exterior.

La cocción de la tarantela deberá hacerse al horno a baño María hasta que coagule la mezcla líquida. Para servir, dejar previamente en heladera unas 9 horas.