Pesadilla sin fin: revelan la tortura que padeció el príncipe Felipe por años

Desde que Isabel II se coronó como la soberana de Reino Unido, el príncipe Felipe permaneció a su lado y la acompañó a todos los viajes nacionales e internacionales que realizó a partir de 1957 hasta que finalmente se jubiló en 2017. Aunque siempre mostró una sonrisa delante de las cámaras y fieles seguidores de la corona británica, con cada tour real al que asistía empezaba a desarrollar de a poco una extraña obsesión nocturna provocada por saludar junto a la reina de Inglaterra a una multitud de personas en la calle.

La prima del duque, Lady Pamela Hicks, luego de leer los diarios personales que escribió en 1950 mientras acompañaba a la reina Isabel II en una gira real por Australia y el Caribe, reveló que el duque de Edimburgo desarrolló una especie de fobia a la llamada "ola real". La pariente cercana del príncipe Felipe también dijo que el gesto con el paso de los años se convirtió en un problema nocturno que le provocaba pesadillas. 

La tortura que experimentó Felipe de Edimburgo por años, consistía en mantenerse quieto mientras sentía sus músculos endurecerse por el continuo movimiento que debía realizar para saludar a la multitud que le gritaba con mucha efusión. Las recurrentes pesadillas no fueron el único efecto colateral de las giras por el mundo: la hija de Lady Pamela asegura que el esposo de la reina Isabel II también quedó muy aturdido.