Suculentas de color morado: una variedad versátil que da un toque decorativo

Cada vez más populares, las suculentas van sumando protagonismo en las páginas de jardinería pero también en las de decoración. Y es que sus colores, en especial aquellas que son de variedad morada, suelen usarse como elemento que suma al estilo de un espacio.

Como todas las suculentas, aún estas de tonos violáceos, no requieren muchos cuidados. Los expertos en jardinería recomiendan que no reciba mucho luz porque ello podría tornarlas de un color más verdoso.

Estas crasas suelen alcanzar los 13 centímetros de altura y otros tantos de diámetro y necesita recibir por lo menos seis horas de luz natural por día. Recomiendan no usar tierra negra sino algún otro tipo de sustrato combinado con humus de lombriz, considerado un excelente fertilizante.

Entre las variedades que se dan en este color se destaca la Sedeveria rubí rosa que, además, muestra una faceta con algo de magia: cambia de color cuando se expone al sol. Esto se debe a que es un híbrido de dos variedades: la Sedum y la Echeveria.

Este tipo de crasa es generalmente verde y con algunos toques de color. Lo curioso es que puede tomar tonos rosados y morados cuando sube la temperatura, sobre todo en la temporada estival.

Otra de las variedades más usadas es la Echeveria champán rosa, también un híbrido creado en Corea, que es muy atractivo visualmente porque tiene tonalidades verdes, moradas, rosas e incluso de color blanco. Además, florece a finales del verano o en otoño.

Si se quiere usar una maceta colgante, la Crassula pellucida es ideal. Tiene hojas abundantes y carnosas de color verde, que dan colores morados cuando está expuesta a muchas horas de sol.