Una noche negra para Andrea Rincón: tuvo doble accidente en "MasterChef Celebrity"

Andrea Rincón es una de las participantes más espontáneas de "MasterChef Celebrity", quien siempre da lo mejor en cada gala en busca de sorprender al jurado. Sin embargo, este domingo no esperaba que dos situaciones la dejaran casi al borde de la angustia.

Luego de que cada uno de los participantes obtuviera su receta de bodegón, comenzaron a correr los 55 minutos que le otorgaba la producción para esta prueba. Andrea intentó hacer todo lo más rápido posible, no obstante, por su apuro no vio dónde ponía el cuchillo y se lastimó un dedo.

"Ay, metí el dedo", gritó frente a todos y sus compañeros que estaban en el balcón también vieron la escena y se lamentaron por la dolorosa herida que la complicaba en una noche tan importante, a todo o nada. "Se cortó mal el dedo", contó Georgina, quien miraba con atención el sufrimiento de su colega.

Rincón se quejó cuando un enfermero ingresó al estudio para vendarle la herida para que pudiera seguir cocinando. "Me arde", aseguró sobre el corte que, al parecer, había sido muy profundo. "Cuando las rachas vienen malas, vienen malas en serio", dijo detrás de cámara.

"Tal vez es estrés", reflexionó la actriz sobre el desafortunado episodio que le dejó un sabor amargo durante toda la noche. Sin embargo, ella, como siempre guerrera, decidió continuar en la competencia.

Casi pierde todo

Luego, la famosa estaba sacando el matambre del horno y cuando intentó colocar la bandeja en la mesada, se le cayó al suelo. De inmediato ella lo agarró y no pudo evitar gritar: "¡Uy, se me cayó el matambre! ¿Qué hago?". Gastón Dalmau, quien miraba atentamente desde el balcón, le respondió: "Nada, metelo" y ella le hizo caso. "El calor mata todo, no pasa nada", justificó él su consejo.

"¿Puede ser que el matambre haya caído al piso y haya vuelto al fuego y que me lo tengo que comer yo de vuelta, como la papa?", la interpeló Damián Betular, a lo que la artista contestó: "El matambre volvió al horno, pero pará, porque me dijeron ellos. Igual, tengo otro matambre". El pastelero le puso los puntos: "Me das el otro, o lo lavás o hacés algo, Andrea".