CON ESTILO
Secretos para que las suculentas crezcan sanas y fuertes en maceta
Con algunos detalles, como particular atención en la luz y en el riego.No hay duda de que las suculentas son plantas que tienen la propiedad de crecer y desarrollarse con escasos cuidados debido a que cuentan con una importante reserva de agua.
Pero aun así es fundamental que nuestras crasas, sobre todo aquellas que se encuentran en macetas, cuenten con abundante luz, riego adecuado y un sustrato apto para este tipo de plantas.
Muchos consideran que a las suculentas no hace falta regarlas. Es cierto que se diferencian de otras variedades vegetales por tener la propiedad de almacenar agua en los tallos, hojas o raíces y de poder sobrellevar los climas más secos, pero eso no las hace infalibles.
Sin embargo, aunque son fáciles de cultivar, hay ciertos tips que no pueden dejar de atenderse a la hora de que crezcan sanas y bellas. Uno de los puntos es regarlas en forma regular y con agua de buena calidad.
Entre los puntos más interesantes a destacar es que es mucho mejor si se riega con agua de lluvia, pero de forma controlada. Lo importante es que no se encharquen y que, cuando reguemos, el agua salga por los agujeros que la maceta tiene para drenar.
Para la época de otoño y el invierno, como las suculentas ingresan a su temporada de descanso, se sugiere bajar la frecuencia de riego a una vez por mes.
Nunca usar atomizador
Este posiblemente sea uno de los más graves problemas ya que atomizar las hojas de las suculentas las volverá más frágiles. Es por eso que lo que se recomienda regar la tierra con un recipiente pequeño o, si es posible, con una cucharita.
Otro de los temas más frecuentemente sugerido por los especialistas en plantas es que las suculentas tienen que tener muy buena luz; si es posible, entre cuatro y ocho horas por día. Lo ideal es ubicarlas cerca de las ventanas que miran al sur o al oeste.