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Mazamorra: receta para preparar el postre que recuerda la gesta patria

En tiempo del Virreinato, lo pregonaban los vendedores ambulantes.
martes, 25 de mayo de 2021 · 11:30

De raíces indígenas, la mazamorra es un postre tradicional de Argentina que se elabora a base de maíz blanco, agua, azúcar y vainilla, aunque también puede llevar leche.

Este postre recuerda a la época virreinal, tiempos en que se pregonaba en las calles de la mano de los vendedores ambulantes, muchos de ellos descendientes de los esclavos africanos, que inspiraron a los personajes que muchos hemos representado en los actos del 25 de mayo.

Puede comerse fría o caliente. 

La mazamorra se consumió mucho hasta principios del siglo XX. Pero luego, con la llegada de los inmigrantes, se desplazó a este noble plato de la gastronomía típica argentina. 

Aun así, la mazamorra continúa siendo una preparación muy habitual sobre todo en la zona de Cuyo y en el Noroeste, y es frecuente incluirlo en los menús de las fechas patrias.

Una vez cocida, se le pueden agregar frutas, compota o mermelada. 

Para elaborar mazamorra (que tiene ciertas similitudes en la preparación con el arroz con leche) se necesitan 500 gramos de maíz blanco, agua, una cucharadita chica de bicarbonato de sodio, leche y azúcar.

Como primer paso se requiere remojar el maíz durante 10 horas. Luego, cambiar el agua y hacerlo hervir en una cacerola. A medida que se vaya evaporando, ir agregando agua caliente.

En los momentos en que el maíz esté a medio cocinar, agregar el bicarbonato y dejar espesar removiendo con una espátula de madera, hasta que esté bien blando. Lo ideal es servir caliente con leche y azúcar. Se lo puede combinar con mermelada de fruta o compota.

 

Un producto regional

El maíz blanco que se usa para la mazamorra es muy similar al amarillo. La diferencia radica en el color pero también en que este tipo de maíz no contiene los pigmentos de aceite de carotina que originan el color del grano amarillo.

La mayor parte del maíz blanco que se produce en el mundo se consume directamente como alimento. Se come de diversas formas, que van variando de una región a otra, como ocurre en Argentina, donde también se usa para elaborar el locro.

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