CON ESTILO

Remedios sustentables para que las suculentas no se enfermen con hongos o plagas

Debe graduarse bien el riego y, además, evitar que las macetas se encharquen.
viernes, 18 de junio de 2021 · 15:28

Su nombre lo indica. Las plantas suculentas son especies vegetales que tienen la capacidad de almacenar gran cantidad de agua para soportar los tiempos de sequía o la aridez de los lugares de donde son originarias.

Lo cierto es que son varias las plagas o enfermedades que pueden dañar el crecimiento de las crasas e incluso llevarla a pudrirse y morir.

Como primera medida, teniendo en cuenta que son proclives a sufrir ciertas enfermedades, es importante que se gradúe muy bien el riego de las suculentas: no excederse, ser moderado si la maceta es pequeña y regar solo cuando el sustrato esté seco o, sino, tener el hábito de hacerlo solo una vez por semana.

El primer paso para cuidar una suculenta es no excederse en el riego.  

Pero, además, estas plantas pueden sufrir de enfermedades crónicas para las que el manejo del riego y la luz del sol ya no pueden mejorarlas y se impone actuar para exterminar a los bichos y así mejorar su crecimiento.

Uno de los remedios más eficaces es un remedio casero que ayude a eliminar esos molestos animales que se alojan en la suculenta, aprovechando el hábitat que se ha generado en nuestra planta al no haberla cuidado correctamente. 

También es importante, ni bien se encuentra algún bicho, rociarla con agua jabonosa. 

Para eliminar estas plagas, se deberá usar un recipiente de plástico, dos cucharadas de tabaco,  500 centímetros cúbicos de agua y una cucharada de jabón neutro. Se deberá mezclar todo y dejar que repose durante 24 horas. Una vez transcurrido este tiempo, se deberá filtrar y ya estará listo para vaporizar sobre nuestras suculentas.

 

Producto natural bueno para las plantas

El tabaco es considerado un insecticida y fertilizante orgánico natural. Gracias a su acción, es posible controlar todo tipo de plagas como la que generan los gusanos, escarabajos, ciempiés, caracoles, cochinillas y otros ácaros.

El interior de los cigarrillos contiene tabaco que ya ha pasado por un proceso de  deshidratación que es lo que garantiza la eliminación de larvas, insectos y semillas. Resulta tóxico para los insectos, que mueren simplemente al tomar contacto con esta sustancia.

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