CON ESTILO

Con sala de juegos y gimnasio: así es el soñado nidito de amor de Oriana Sabatini y Paulo Dybala

Cuenta con un cuarto con piano y otro donde guardan trofeos, fotos y camisetas.
miércoles, 2 de junio de 2021 · 14:35

Durante 2020, cuando la pandemia arrasaba en Italia, Paulo Dybala y Oriana Sabatini cumplieron un estricto aislamiento, aunque también se dieron tiempo de arreglar su casa y mostrar detalles de cada rincón en las redes sociales.

Y es que su lujosa mansión en Turín ha sido uno de los escenarios en los que la hija de Catherine Fulop y el futbolista mostraron su vida cotidiana, su buena relación de pareja y el vínculo que tienen con sus mascotas.

La casa cuenta con el mejor equipamiento para el jugador. 

La casa de Oriana y Paulo es sumamente lujosa: cuenta con un amplio parque donde tienen una piscina. En ese espacio, durante los días lindos, entrenan y además disfrutan del aire libre.

En el interior de la casa, la cocina es el sitio predilecto de Oriana. El ambiente está decorado con muebles de color blanco y cuenta con los más modernos electrodomésticos. Allí tiene una barra para desayunar y disfrutar de una picada.

Los ambientes de la residencia están decorados en su mayoría con color blanco. En el living, hay tres sillones y una mesa de vidrio y destaca un gran televisor empotrado además de ciertos detalles que marcan que allí vive un gran deportista: la colección de trofeos de Paulo.

Cuando llega el calor, la piscina se vuelve uno de los sitios preferidos. 

Para distenderse, incluso cuentan con un cuarto musical donde instalaron un piano Yamaha de color negro, además de un sofá. Pueblan las paredes y los estantes un gran número de portarretratos con las fotos de la pareja en los distintos lugares que visitaron.

 

Juventud, divino tesoro

La casa de Oriana tiene además una sala de juegos, donde Paulo disfruta cuando puede de uno de los preferidos: nada menos que un simulador de carreras. También cuenta con una habitación especial donde guarda todas las camisetas que intercambió en sus años de trayectoria.

En la sala de juegos, Pablo disfruta de su simulador de carreras. 

Se los ve habitualmente en el gimnasio y, ahora que llegó la primavera a Europa, también gozan del jardín donde pueden entrenar sin tener que salir. Allí tienen una enorme piscina, el lugar ideal para pasar los días de calor y disfrutar.

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