ESCÁNDALO
Fue noticia por tirar un cerdo desde el aire: qué es de la vida del empresario Álvarez Castillo
Dueño de una lujosa marca de ropa, es pareja de la modelo Lara Bernasconi.El hecho sucedió antes de que se iniciara la pandemia cuando, en Uruguay, muchos estaban disfrutando de las vacaciones. Y fue en ese momento cuando Federico Álvarez Castillo, el dueño de la marca de ropa Etiqueta Negra, cometió un hecho inexplicable y reprochable: tiró un cerdo desde un helicóptero a la pileta de su casa.
La escena recorrió los canales de televisión y las redes y la actitud del empresario fue repudiada por uruguayos, argentinos, veganos y protectores de animales que no podían con el asombro por semejante actitud.

Lo cierto es que, desde aquel entonces, y luego de pedir las disculpas (para algunos inentendibles sobre semejante hecho) Federico Álvarez Castillo continuó con su vida aunque con un muy bajo perfil.
El empresario es pareja de la modelo Lara Bernasconi y aunque muchos lo recuerdan por el hecho del cerdo que caía desde las alturas, es conocido en el mundo de la moda por ser creador de marcas que fueron éxito años atrás: Mango, Motor Oil, Bowen y Paula Cahen d’Anvers, quien fue su mujer y con quien trabajaban en conjunto.
Actualmente alternan la vida entre la residencia Manantiales, Uruguay, según publica en sus redes sociales, y la impresionante casa que tienen en la zona norte del conurbano bonaerense donde tienen un baño que hace a las veces de spa y donde cuenta con un amplio taller para guardar sus lujosos autos de colección.

Lujo por donde se mire
La vivienda donde suelen residir cuando están en Buenos Aires fue construida en un country privado de zona norte y decorada por la marca FAC Design Group, que es otras de las empresas que posee Álvarez Castillo.
Puede verse que también allí cuenta con una pileta de grandes dimensiones, todo con revestimiento de venecitas. El parque tiene espacio para un amplio deck donde abundan las reposeras negras con soportes de acero.
El living cuenta con detalles de lujo como obras de arte, sillones blancos y un fogón donde encienden leños de quebracho. El comedor está ambientado con sillas Kennedy, que son una de las tendencias en decoración.