La triste historia detrás de la fama del Nicolas Cage: del éxito a la bancarrota y el anonimato

Hasta hace algunos años atrás, Nicolas Cage era uno de los actores y cineastas más famosos del Hollywood. Sin embargo, hubo varias situaciones que atravesó a lo largo de su vida, que lo dejaron en completa bancarrota y lograron que todo el éxito logrado en estos años, se fuera por la borda.

Durante los primeros años de su carrera, el protagonista de "Ghost Rider" supo administrar de manera favorable sus millones, pero con el paso de los años, los fondos se terminaron, y Nicolas no pudo renunciar a su costoso estilo de vida, por este motivo, terminó en bancarrota, un presente que nadie imaginaba para un artista de su calibre.

En el momento en que Cage empezó a acostumbrarse a gastar grandes cantidades de dinero, su cuenta bancaria dejó de recibir tantos ingresos, por lo que rápidamente se vio totalmente quebrado. Entre los caprichos a los que Nicolas nunca renunció, se encuentran dos castillos, quince casas, una flota de yates y algunos vehículos Rolls Royce. 

Además, Nicolas se compró su propia isla en Las Bahamas para vacacionar, e invirtió en animales exóticos para tener como mascotas, como dos cobras albinas valuadas en 270.000 dólares y un pulpo gigante por 150.000 dólares. No caben dudas de que estos gastos innecesarios hicieron que Cage perdiera gran parte de su dinero.

Todas las propiedades que Nicolas Cage posee en varias ciudades de Estados Unidos, sumaron varios impuestos que jamás se pagaron, esto generó una gran deuda en la cuenta bancaria del actor, ya que tiene muchas casas a su nombre.

El mayor gasto: la puerta de la bancarrota

Aunque todos estas compras generaron una suma de deudas terrible, el gasto más importante de Nicolas Cage fue un fósil de cabeza de dinosaurio de más de 67 millones de años de antigüedad, lo cual tuvo un valor de 246.000. No caben dudas de que estos gastos tuvieron un fuerte impacto en la economía del actor.