Un gestito de idea: pionero de los programas infantiles, Carlitos Balá está en el recuerdo de muchos

Cada agosto, su cumpleaños se festeja con bombos y platillos. Y es que Carlitos Balá, el creador de varios hitos en lo que se refiere a programas para niños, convoca a grandes y chicos de varias generaciones.

El actor, que este pasado viernes cumplió 96, supo generar empatía con el público infantil desde los años 60 cuando instauró un par de clásicos que pasaron a integrar la idiosincrasia argentina como el chupetómetro, donde los nenes iban a dejar el chupete, el “sumbudrule” y también el recordado “¿qué gusto tiene la sal?”.

Son muchos los que aún, como integrantes de grupos de riesgo en la pandemia, tienen entre sus frases habituales, alguno de los latiguillos que usaba Balá en sus programas como “un gestito de idea” y “un kilo y dos pancitos”.

Nacido en el barrio de Chacarita,  tiene algunas esculturas que lo reflejan como vecino ilustre, sobre todo en la pizzería Imperio de Lacroze y Corrientes. Su papá tenía una carnicería y allí recreaba historias que el mismo inventaba. Aunque sus inicios fueron en la radio, fue la televisión donde se lució como showman de los más pequeños. En 1964 inició “El Show de Carlitos Balá” que le daría fama y el cariño de los nenes. Nunca abandonó el flequillo recto  y logró récords de audiencia.

Para dejar el chupete, andá a lo de Balá

Si hubo un hito en su carrera fue sin duda el “chupetómetro”, un gran recipiente cilíndrico de dos metros de alto donde los niños de varias generaciones dejaron sus chupetes. Este se se repitió en otro programa que condujo Julián Weich, pero el original era el de Balá que logró cifras siderales. 

Nunca los conté, ojalá lo hubiera hecho, porque hubiera entrado en el Guinness. Dos, tres millones, qué sé yo.

Sobre la frase “qué gusto tiene la sal?” nació en 1969 en Mar del Plata donde Balá solía vacacionar cada verano donde se preguntó qué gusto tendrá el mar y así llegó a la frase que lo mantiene vigente. 

Siempre prolijo y ordenado en el trabajo, se ocupaba de cada detalle de sus espectáculos en teatro, que se sumaron a la tele. Guarda  las fotos que le regalaron sus seguidores y sigue casado con la misma mujer de la que se enamoró cuando era chico, Laura.