CONFLICTO
"Sigo dolido": Mau Montaner no le perdonó esto a una participante de La Voz Argentina
El hermano de Ricky se sinceró en el reality de Telefe y dejó a todos boquiabiertos.En cada nueva gala de "La Voz Argentina" los participantes tienen que convencer a los jurados de que son los mejores para continuar en su equipo. Esta vez, Mau Montaner no le perdonó una situación pasada a una concursante, quien pasó un incómodo momento frente a todos.
Azul y Federico interpretaron "A sky full of stars" de Coldplay, un desafío demasiado pretencioso que no pudo ser lo que Lali esperaba por una serie de errores que cometieron ambos. Además, cuando llegó el turno de dar su opinión, el hermano de Ricky aprovechó para sacar los trapitos al sol.
"Sentía que tu querías que a ella le vaya mejor que a ti, que le estabas limpiando el piso justo antes diciendo: 'Dale, camina, camina'. Pendiente de que ella esté bien, que me parece un gesto de caballero hermoso. Dentro de la batalla yo creo que por eso pasaron esos momentos juntos, porque tú estabas pendiente de qué tal estaba cantándola ella, por lo que estabas un poquito desconcentrado en tu parte", admitió Ricky y Mau decidió primero quedarse callado.
Luego, el prometido de Roitman recordó lo ocurrido en las audiciones a ciegas: "Nosotros no peleamos a muerte por Azul, ella me parece increíble". Sin poder resistir a este comentario, el reggaetonero le dio la razón: "Yo sigo dolido, la verdad. Por eso no quiero opinar".
Ricardo hizo de las suyas
El padre de Evaluna volvió a protagonizar un divertido momento en el reality de Telefe al hacerle una broma muy pesada al dúo de Gonzalo y Gabriel y a su contrincante, Mariano. Con Nahuel Pennisi como co-coach, él se animó a hacer de las suyas al darles un susto a los participantes en pleno ensayo.
"Les quería contar algo. Por una cuestión de órdenes de la producción la batalla va a ser ahora y Nahuel va a ser quien va a decidir quién se va y quién se queda", anunció el cantautor venezolano. Sin embargo, su farsa cayó de inmediato, ya que su colega no aguantó la risa y dio por terminada la incómoda situación. ¡Qué maldad!