Separados pero amigos por sobre todas las cosas: la historia de amor de Julieta Ortega e Iván Noble

Nadie que los vea juntos puede imaginar que fueron pareja y ahora están separados. Y es que el vínculo que formaron Julieta Ortega con Iván Noble se mantiene inalterable aun con el paso del tiempo y la distancia.

Lo cierto es que la hija actriz de Palito y el músico estuvieron casados, luego se divorciaron y ahora continúan con un lazo inalterable entre ellos y un amor compartido hacia su hijo en común.

Según Iván, la vida se cuenta en función de Mundiales porque, cada vez que se pregunta cuánto hace que se separó de Julieta, él lo dice así: “pasaron tres mundiales”. Los artistas se conocieron en 2001, cuando él tenía 33 años y ella 29, y tras un noviazgo muy breve, decidieron dar el sí en una boda, pocos meses después. “Nos casamos después de seis meses de salir y, si lo pensás, fue muy raro, porque estabas en un momento de gran éxito, digamos la verdad, andabas con todo Buenos Aires”.

Más allá de la separación, el amor sigue intacto. Y lo toman con total naturalidad, tanto que parece lo más común del mundo. Ellos aseguran que es la forma en que debería ser con alguien que fue tu compañera de vida y con quien hay un hijo en común.

Siempre nos llevamos bien. Por supuesto que tenemos nuestras discusiones, que suelen ser domésticas y  de crianza .

El otro amor

Cuando tenían tres años de casados llegó Benito y los unió para siempre. Tanto Julieta como Iván aseguran que, sin importar si son pareja o no, forman una familia especial. Al respecto, Iván sostiene que tener un hijo, para él, es como dice la canción de Los Cadillacs: “´no me quedo nunca más solo´. Por más que mi hijo ahora casi no me da bola”.

Para Julieta es sorprendentemente grato que el padre de Benito ponga en primer plano a su hijo. “Viene él y después todo lo demás. Benito es el centro de todo en tu caso”, manifestó la actriz.