“Perdí los estribos”: un ex Mambrú habló sobre los problemas que tuvo luego de que se separaron

Gastón Pauls lleva adelante “Seres Libres”, un novedoso programa que se emite por Crónica TV, en donde invita a personalidades del ambiente artístico para que hablen de las adiciones que tuvieron en su vida las cuales pudieron superar. En su último episodio Gastón estuvo con Germán Tripel, un joven que brilló en el reality televisivo Popstars en el año 2002, del cual surgió el exitoso conjunto Mambrú.

Allí, el artista se refirió a lo que le sucedió cuando el famoso grupo al que pertenecía, junto a Pablo Silberberg, Emanuel Ntaka, Gerónimo Rauch y Milton Amadeo, se separó en el 2005. “Fue como un viaje de egresados emocionalmente, y psicológicamente fue un golpe muy fuerte, fue una caída muy fuerte para un chico de 23 años que te suban así y que estén todos para decirte ‘sí, está buenísimo’ y de repente que se baje, que te caigas y que nadie esté para acompañarte, salvo la familia, que por suerte estaba”, comentó el artista. Del mismo modo, añadió: “A raíz de eso empecé a perder un poco la noción de lo que quería, y de cómo hacerlo. Salía todos los días, consumía drogas, tomaba mucho alcohol y llegué a pensar en suicidarme. Ahí perdí los estribos, me deprimí un año, me mudé de vuelta con mis viejos y les desfondé el sillón porque estaba todo el día tirado; para lo único que me levantaba era para ir a entrenar, que era como lo único que me desconectaba de esa sensación”.

Tripel se refirió al duro golpe que sintió cuando el conjunto se disolvió. “Empecé con la depresión, a preguntarme: ‘¿Qué soy? ¿Fui solo un producto?’ Cuando terminó Mambrú yo tenía 25 años y fue en ese momento que aparecieron las drogas. Empecé con pastillas, LSD y cocaína, pero nada inyectable, me ofrecieron, pero no llegué y después empecé a buscar antidepresivos, le robaba a mi vieja, mezclaba cosas con el alcohol y de repente tener estos picos de éxtasis y después a querer matar a todo el mundo o matarme yo”, manifestó el cantante. Igualmente, añadió: “En la depresión no sabes quién sos y terminé siendo un esclavo de mi propio juicio de valor. Cuando pasaba por el puente de River, en la Avenida Lugones, hasta la curva cerraba los ojos y que pasara lo que tenía que pasar; tipo tres de la mañana, cuando ya no había mucha gente, un inconsciente total”.

Días felices

A pesar de haber vivido días muy duros, Germán reveló que pudo volver su vida a la normalidad gracias a su familia y sus afectos más cercanos. En el 2011 se casó con la famosa actriz Florencia Otero y fruto de ese amor nació la pequeña Nina. “Hacemos muchas cosas separados y cuando uno ama y admira a alguien siempre es poco el tiempo que pasa con el otro. Nosotros nos elegimos todo el tiempo, más allá de los desencuentros que tenemos como cualquier pareja, porque ya sabemos que funcionamos bien en casa, con la banda, en las obras”, confesó el compositor.