Jorge Lanata se sinceró sobre Angélica, su madre adoptiva

Para el mundo del periodismo de investigación, Jorge Lanata es palabra mayor  —le pese a quien le pese— y este domingo tan esencial en Argentina donde se celebró el día de las madres, el comunicador social comenzó su programa de una manera distinta, con gran emoción.

El conductor de “Periodismo para Todos” tenía un amplio abanico de contenidos para dar inicio a su monólogo. El propio  Jorge Lanata dijo que podía empezar con Massa, la inflación, la despedida de Manzur en el Gabinete, el Presidente de la Nación o la vice; sin embargo, cambió de rumbo.

“Les quiero hablar del Día de la Madre, de las madres, de mi madre”, dijo Jorge Lanata y cambió el foco de atención de los televidentes con una impresionante reflexión: “Yo conocí a mi mamá de una manera extraña. Ella tuvo un tumor cerebral cuando yo tenía seis o siete años”.

Sobre eso, el rostro de El Trece reveló que su madre vivió más de cincuenta años con un lado del cuerpo paralizado, el derecho, y por eso sufrió una lesión en el centro del habla: “No podía formar palabras: entendía si le hablaban, pero solo podía decir sí o no, o emitir sonidos”, contó Lanata.

Pese a eso, el autor de “Muertos de Amor” contó que aprendió bastante de su madre y eso es lo que quiso compartir abiertamente con sus seguidores y quienes se sumaron a la audiencia de “PPT” ayer por la noche: “Yo aprendí de mi mamá, que no hablaba, que hay que sobreponerse a la dificultad, sea cual sea”.

Pude sentir su amor y darle el mío. Aprendimos a comunicarnos: sus ojos verdes se reían con mis chistes malos y su mano izquierda apretaba la mía cuando estaba feliz o angustiada

La resiliencia y el amor bastó 

Jorge Lanata se enteró hace tan solo seis años que su madre lo había adoptado, es decir esa mujer que estuvo 50 años sin poder hablarle nunca le dijo la verdad, pero eso no fue un traspié para el investigador, cuando a los 56 años alguien le contó sus orígenes. Sobre ello, habló hace algunos años en la mesa de Mirtha.

Esa información tampoco lo movilizó al punto de querer indagar sobre su nacimiento, Lanata siempre cuenta: “Todavía me preguntan en los reportajes por qué no quise averiguar de dónde venía. La respuesta es obvia: yo sé de dónde vengo, mi mamá era una señora de ojos verdes, con la que nunca pude cruzar una sola palabra, con la que teníamos grandes diálogos con solo mirarnos. Feliz día de la madre”, cerró.