Tras la polémica, Facundo Arana inicia un nuevo capítulo: "Las acciones lo definen a uno"

El mes pasado, estalló una bomba en en el mundo del espectáculo cuando Romina Gaetani visitó “LAM” y dio a conocer su experiencia laboral con Facundo Arana, algo que no la dejó con el mejor recuerdo y, de inmediato, se posicionó al actor como una persona violenta o cuestionable.

A lo largo de estas semanas numerosas personalidades salieron a brindarle apoyo al protagonista de “Padre Coraje”, mientras que él se apoyó en su familia y seres cercanos hasta que el equipo de abogados liderado por Fernando Burlando se hizo cargo de la situación. Finalmente, Facundo Arana apareció ayer.

Después de un tiempo sin explayarse sobre sus sensaciones y presente, Facundo Arana se despachó con un posteo muy profundo en el que le dio gracias a quienes estuvieron cerca. “Muchísimas Gracias por las infinitas muestras de cariño recibidas”, dijo al comenzar la publicación.

“Estos días los dediqué a acompañar y estar acompañado por mi familia. Me dediqué a pensar mucho. Yo tengo claro mi propósito en la vida, similar al de casi todos: vivir en paz, aprender de todo y tratar de dar una mano siempre que puedo”, escribió el saxofonista y continuó.

“Creo que las acciones lo definen a uno mucho mejor que las palabras. Y todos los días me voy revisando y voy intentando acomodar imparcialmente las cosas para construir mi mejor versión, pero no para mostrar, sino para habitarla”, así cerró su reflexión Arana y se llevó casi 50 mil likes y una gran cantidad de mensajes de apoyo.

Cómo llegaron a un acuerdo Arana y Gaetani

Antes de que terminara el mes de mayo, los implicados en esta situación que se volvió viral y estaba cargada de altas expectativas por parte del público se reunieron en un hotel de Puerto Madero. Así como a Romina Gaetani la acompañaba su abogado Ignacio Trimarco, a Facundo Arana lo apoyaba el doctor Fernando Burlando.

Muy lejos de confrontar, el autor de "La Pluma de Cali" y la actriz dialogaron sin intenciones de ir a una instancia legal y llegaron a un acuerdo, ninguno desestimó lo que vivió el otro, pero “limaron las asperezas” y ambos dieron por terminado el tema de una manera mucho más rápido de lo que algunos esperaban.