Jade chino: la suculenta que te robará la atención

Una de las plantas suculentas más maravillosas que podemos encontrar en el mercado es el jade chino, botánicamente llamado Sinocrassula yunnanensis. Esta hermosa planta tiene su origen en la provincia de Yunnan; de ahí, su nombre.

La crasa que conoceremos hoy es relativamente fácil de cultivar y mantener, pero obviamente necesita ser reconocida para poder detectar sus necesidades. Esta suculenta es muy admirada y se caracteriza por sus hojas gruesas y carnosas que crecen en forma de roseta densa, parecida a un erizo.

Antes de conocer las particularidades de su cuidado, es necesario remarcar que es normal que la gente la confunda con la planta de jade —Crassula ovata—, aunque las dos son suculentas tienen características diferentes que, por tanto, hacen que sus cuidados también lo sean. Te recomendamos leer la nota completa para enterarte más.

Cuidados del jade chino

Esta planta puede alcanzar alrededor de un metro de altura. Crece de forma densa y tupida en sus condiciones ideales. La Sinocrassula yunnanensis soporta bastante bien el invierno y se aclimata a temperaturas variadas; sin embargo, no sobreviviría a una exposición prolongada al frío y la humedad. Es recomendable su cultivo en interiores y moverla al aire libre solo cuando el tiempo es agradable.

Condiciones de luz

El jade chino prefiere la luz brillante y se puede cultivar bajo la luz solar directa. Sus hojas adquieren un color negro violáceo cuando crecen bajo esas condiciones.

Sin embargo, puede llegar a quemarse cuando están a la intemperie durante todo el verano; por lo tanto, necesitarás tener luz filtrada o plantas que puedan ofrecer sombra en las horas más peligrosas de sol.

Suelo

Al igual que otras variedades de suculentas, esta planta prefiere un suelo con drenaje libre. Si la vas a cultivar en tierra firme, asegurate de mezclarla con arena para mejorar el drenaje, si es que en tu jardín suele retenerse el agua.

Tené en cuenta que las plantas de interior se pueden cultivar en recipientes llenos de una mezcla especial para cactus y suculentas. Si vas a usar contenedores de plástico, asegurate de que haya arena u otro sustrato para favorecer el drenaje.

Riego recomendado

Lo ideal es no mojar la planta, siempre regar sobre la tierra directamente. Es necesario humedecer con moderación, ya que, si lo hacés en exceso, podrías debilitar a la planta.

Si bien al jade chino le gusta el ambiente húmedo —entre un 50 y 80% de humedad— hay que ser cuidadoso. Un buen tip es usar una bandeja con piedras y agua y poner la maceta sobre esto.

Fertilización

En general, esta planta no requiere demasiada fertilización; sin embargo, cuando el suelo en el cual se cultiva es pobre y carece de nutrientes, es necesario agregar abono orgánico y fertilizantes. Distribuilo siempre alrededor de la maceta y lejos de las raíces, ya que los productos podrían quemarlas.

Poda, propagación y floración

La poda de esta suculenta ayuda a desarrollar un follaje más denso, pero, si se hace de forma muy frecuente, se puede restringir el crecimiento. Para conservar su forma y evitar las “piernas largas”, se debe realizar la poda durante los meses cálidos. Es ideal hacerlo después de la lluvia para fomentar la curación y el nuevo crecimiento.

Respecto a su propagación, la mejor manera es a partir de los esquejes de su tallo. A partir de una rama sana, se podrá hacer un nuevo ejemplar. Deberás enterrar el esqueje y esperar unas semanas hasta que enraíce.

Para cerrar, la Sinocrassula yunnanensis posee, en en la punta del tallo, una rica inflorescencia que se convierte en diminutas flores blancas. La planta florecerá a finales del verano o del otoño.