No vas a comprar más: cómo germinar tus propias frutillas, con este sencillo e infalible truco

Si de ahora en más querés cultivar las frutillas por los altos precios que manejan en el mercado, podrás hacerlo de una forma práctica y muy económica. 

El primer paso para germinar esta fruta desde cualquier lugar es comprar dos o tres frutillas y quitarles la piel, ya que es precisamente lo que usarás durante todo el proceso.

Cuando completes al pie de la letra las indicaciones remarcadas, buscá una macera y, adentro de esta, vertí tierra. Luego, de forma ordenada y estirada, vas a colocar encima del sustrato la piel de las frutillas. 

Para el siguiente paso, tendrás que tapar la piel de las frutillas con más tierra pero de forma sutil, no de forma abundante, para que el resultado final sea el esperado.

Ya para final, deberás vertir en la maceta una cantidad considerable de agua para que la tierra quede completamente húmeda y las frutillas puedan germinar.

Ahora bien, en este punto, los expertos en el área recomiendan sellar por completo la maceta con papel film y hacerle 7 o 8 aberturas para que la arena respire. 

Luego de un mes de reposo en un sitio medianamente soleado, la germinación ya se habrá completado y las ramas de las frutillas ya tendrían que haber empezado a aparecer.

Por último, pero no menos importante, los profesionales en la materia aconsejan sumar al sustrato una cucharada de café para que crezcan sanas y fuertes.

Este ingrediente en particular aportará el nitrógeno que necesita la planta y hará que su crecimiento sea saludable, pese a cualquier tipo de circunstancia.  

Si seguís los lineamientos sugeridos, podrás germinar este alimento en menos de un año de forma abundante y así evitarás gastar demasiado dinero en el mercado.