Georgina Barbarossa
Georgina Barbarossa confesó cuál es su mayor temor
La conductora de televisión habló en La Once Diez/ Radio de la Ciudad.Durante las últimas horas, Georgina Barbarossa reflexionó sobre su vida en La Once Diez/ Radio de la Ciudad y, en el proceso, realizó una importante confesión.
Para ser exactos, a la conductora de televisión le preguntaron sobre sus temores y, sin dar tantas vueltas, ella primero aclaró: "No le temo a la muerte".
En ese contexto, Georgina Barbarossa siguió: "Le temo a las enfermedades". Luego, la figura estrella de Telefe explicó el porqué de su temor.

Concretamente, Georgina Barbarossa dijo que quería una vida libre de sufrimientos: "No tengo ganas de sufrir. El ejercicio es importantísimo para poder vivir mucho más".
Aunado a ello, durante la charla que sostuvo con el programa radial "Agarrate Catalina", Barbarossa se refirió a los arrepentimientos que hoy carga consigo.
Para ser exactos, la actual conductora de "A la Barbarossa" expresó: "En la vida me hubiese gustado ser más paciente. Poder no estar tan preocupada por el porvenir".
Sin lugar a dudas, fue una entrevista muy significativa para Georgina, ya que estuvo cargada de confesiones personales nunca antes realizadas.
El nuevo dolor de cabeza de Georgina
Días atrás, Carmen Barbieri debutó como conductora en la pantalla de El Trece con el formato "Mañanísima", espacio que antes conducía en Ciudad Magazine.
Tras su debut, Carmen empezó a medirse directamente con Georgina Barbarossa, quien conduce en un horario similar al suyo, "A la Barbarossa", pero desde la pantalla de Telefe.
Ahora bien, Barbieri no se apoderó del horario correspondiente, pero sí desafió en numerosas oportunidades los números de Georgina. Un ejemplo claro de ello se evidenció el viernes 3 de octubre, cuando la primera sostuvo su formato en 2.7 puntos de rating, mientras que la segunda lideraba con 3.6 puntos.
La diferencia entre un programa y otro es de menos de un punto de rating, por lo cual, se cree que la llegada de Carmen a El Trece representa un gran dolor de cabeza para Barbarossa, quien antes mantenía una significativa diferencia de ratings con la competencia.