Cómo conseguir una increíble lengua de suegra, el secreto está en tu alacena

Una de las suculentas que más se destacan es la sansevieria, conocida también como lengua de suegra. Esta hermosa planta es fácil de cultivar y de propagar, por lo tanto es vista en numerosas casas y viveros. En esta nota, veremos algunos trucos para cuidarla más y obtener mejores resultados.

Hay que tener en cuenta que esta crasa tan popular de hojas largas rígidas y con diferentes tonalidades de verde, crece lento y por eso te brindaremos algunas curiosidades para que puedas darle un empujón. El secreto de la suculenta está en tu cocina.

De la alacena a la maceta

Aunque suene imposible, un ingrediente que podría estar en tu alacena ayudará a esta suculenta a crecer más y mejor, se trata del cacao. Esto hará que la planta obtenga nutrientes necesarios para crecer con rapidez por la alta cantidad de potasio y fósforo que tiene este producto.

El truco está en esparcir una cucharadita de cacao sobre la tierra mezclada con sustrato o bien enterrar este producto en la tierra de modo que cuando reguemos la sansevieria, los nutrientes lleguen a las raíces.

Si bien es un truco muy eficiente y eficaz, hay que tener en cuenta que la planta progresa lentamente, por lo cual te recomendamos tener paciencia y no esperar el estirón de la suculenta de un día para el otro.

Otra recomendación que deberías seguir es no dejar de lado los fertilizantes que se agreguen al sustrato, ya que tienen una labor muy importante en nuestras plantas. Mantente siempre atento a las manifestaciones de la planta: cómo están sus hojas, si necesitan hidratación o si, por el contrario, sufren demasiada humedad.

Curiosidades de la sansevieria

Esta suculenta, originaria del oeste de África y perteneciente a la familia de las liliáceas, tiene algunas propiedades medicinales que no todos conocen y una de ellas es que ayuda a cicatrizar heridas.

Además, la sansevieria disminuye el dolor de cabeza —incluso las migrañas— y también reduce los niveles de azúcar en la sangre. Como si fuera poco, esta suculenta alivia los padecimientos del riñón y combate las inflamaciones de las vías respiratorias. Otro plus es que previene el cáncer y tiene propiedades laxantes.