Plantas
Planta del templo: cómo cultivar en casa una suculenta de orígenes africanos
Esta es una de las plantas carnosas que florecen dos veces al año, por lo que se volvió un completo atractivo.En esta nota dedicada a las suculentas hablaremos de Kalanchoe thyrsiflora, una planta que requiere de sencillos cuidados para crecer a la perfección y que te sorprenderá con hojas muy atractivas.
Esta crasa pertenece a la familia de las crassulaceae y tiene sus orígenes en Botsuana, Lesoto y Sudáfrica. Se caracteriza por presentarse con una roseta basal con grandes hojas carnosas y redondeadas. Lo maravilloso de ellas es que son de color verde con tintes rojos y están cubiertas por algunas pelusas blancas.
Cuidados de la suculenta Kalanchoe thyrsiflora
Clima y suelo
Esta suculenta, como todas las de su familia, soportan muy bien los climas calurosos y secos. Está acostumbrada a los climas cálidos, por lo cual no soporta temperaturas por debajo de los 10ºC
También suelen desarrollarse bajo el sol directo, aunque hay que tener precaución si se la saca de su hábitat natural, porque hasta que logre familiarizarse puede ser víctima del calor intenso y sus hojas pueden llegar a quemarse.
Cuando se cultiva esta suculenta en macetas es necesario ser generosos con los nutrientes y el sustrato que se le otorga a la tierra para poder ayudarla a desarrollarse. Por tanto, es válido que uses un buen sustrato, vermiculita, piedra volcánica, fibra de coco u otros complementos para que la tierra conserve humedad.
Riego
En el caso de la planta del templo, como también es conocida, el suelo debe ser húmedo, pero no en exceso, recordá que hay que evitar el encharcamiento de sus raíces.
La frecuencia del riego es poca, pero la cantidad de agua que necesita esta planta es bastante, por lo que deberás ser más generoso que con las demás suculentas de cultivo casero.
Reproducción de Kalanchoe
Las suculentas de esta familia se reproducen muy fácilmente, lo pueden hacer a través de esquejes de hoja o de tallo. Si elegís hacerlo por hoja, deberás cortar una madura y sana con un cuchillo afilado y desinfectado y evitar que se rompa. Recordá que se desprenden con gran facilidad.
Luego deberás dejar que se seque la herida de la hoja durante dos días aproximadamente. Se formará un callo y una vez que suceda esto será necesario plantarla en sustrato. Al cabo de unas semanas podrás ver actividad.
Si la reproducción es por tallo se realiza de igual manera, incluso podés dejarla en un vaso con agua para que la planta desarrolle las raíces ahí mismo. Aunque no es muy común, hay gente que prefiere tener su suculentas en agua y lo maravilloso de la naturaleza de estas plantas carnosas es que sobreviven muy bien.
Floración
Es necesario tener varios ejemplares de la planta del templo, ya que es una suculenta que florece durante el otoño y la primavera, en este caso podremos ver que la suculenta le da lugar a un largo tallo con flores tubulares de color amarillo
Lo triste de esta hermosa planta es que una vez que florece, la crasa muere. Es probable que naturalmente y gracias al desprendimiento de sus hojas ella se haya propagado en el jardín donde crece, pero en el caso de los ejemplares que crecen solos, te recomendamos propagarla en varias ocasiones para cultivar más.