Crassula Tillaea: la pequeña suculenta que sorprende con sus colores

Crassula tillaea es una de las suculentas más atractivas, perteneciente a la familia crassulaceae. Se destacan por ser pequeñas hierbas perennes de raíces fibrosas. El tallo de esta planta es cilíndrico, erecto y ramificado.

Esta hermosa crasa tiene flores de color blanco verdoso, rosado, amarillo o rojo. Esta suculenta crece especialmente en las zonas rocosas, aunque también se asocia a las comunidades acuáticas. No suele crecer muchos centímetros de longitud y sus hojas apenas tienen unos milímetros de largo.

Iluminación

Esta planta necesita suficiente luz dispersa y debe ser brillante, por lo que la luz solar es sumamente importante de manera prolongada para que pueda crecer suelta.

Cuando la planta recibe la luz que necesita, su color será verde y amarillo brillante, pero se recomienda tener cuidado con las altas temperaturas en verano, ya que el sol puede quemar sus hojas y tallos. 

Temperatura 

Crassula tillaea es adecuada para crecer en temperaturas suaves, como las de primavera y otoño, no tiene resistencia al clima frío, por lo que, si está en la región de estas características, no se recomienda plantarla directamente en el jardín, sino más bien en una maceta.

Si la temperatura es superior a 30 ºC en verano, esta suculenta puede entrar en estado latente, es decir, necesita menos riego. Su temporada de crecimiento más fuerte es en primavera y, en otoño, necesita un poco más de agua.

Suelo

Esta planta carnosa suele crecer en suelos rocosos, es por eso que, al ser trasladada a maceta o a fosa de jardín, necesita tierra suelta y ventilada. Deberás considerar una mezcla con sustrato y, en la parte superior, usar suelo de decoración, como guijarro blanco, cadama o arenas, así se permitirá una capa hidrofóbica que cuidará las raíces de esta planta. 

Fertilizantes

Las plantas suculentas suelen crecer en ambientes hostiles. Al ser trasladadas a viveros, jardines o macetas, necesitan fertilización para su crecimiento. Para esto, se puede agregar algunos componentes para ayudarla en su crecimiento. Pero evitalos en época de latencia.

Propagación y plantado

Casi todas las suculentas se pueden propagar gracias a sus hojas, sus troncos y también por semilla, aunque estas suelen ser más difíciles de germinar.

En el caso de Crassula tillaea, es mejor cortar de cinco a ocho centímetros de su tallo durante el otoño o la primavera y proceder a la propagación. Tardará de 7 a 14 días en mostrar señales de crecimiento.