3 trucos infalibles para recuperar los abrigos encogidos en el lavarropas

De cara al otoño, muchas personas comenzaron a renovar su placard al guardar las prendas de verano y sacar las de media estación. Por eso, para evitar maltratos en los abrigos, te recomendamos leer bien las etiquetas del lavado.

En caso de que ya hayas cometido el error garrafal de provocar el encogimiento de tus abrigos en el lavarropas o en la centrifugadora, te vamos a enseñar a recuperarlos gracias a algunos trucos del hogar que son infalibles y que pasaron de boca en boca durante años. 

Acondicionador 

Este es es el primer hack para poner en práctica si tu abrigo se encogió o está un poco estropeado por los lavados a máquina. Necesitas poner el tejido de punto en remojo con agua fría y con tres o cuatro cucharadas de acondicionador.

Deja que actúe toda la noche y al otro día verás que volvió al tamaño original. Cuídalo más que nunca.

Leche

Un jersey encogido va a volver a su estado normal con el truco de la leche. Deja toda la noche en remojo la prenda en una mezcla de agua tibia con leche. A la mañana siguiente, verifica el tamaño, pues, sus fibras habrán vuelto a la normalidad.

Vinagre y mascarilla de pelo

Prepara en un bowl, en el que entre la prenda, una mezcla con un vaso de vinagre, dos cucharadas de mascarilla para el pelo y también añade agua hasta la mitad del recipiente.

Remueve todo hasta que quede una mezcla homogénea. Luego, debes sumergir la prenda encogida durante media hora para que los productos se impregnen en las fibras de lana y las vuelvan a estirar.

Acto seguido, enjuaga con agua fría y procede al secado al aire libre de forma horizontal o colgado en una percha, pero sin usar pinzas para que pueda estirarse al máximo sin deformarse. 

Cómo evitar el encogimiento de los abrigos 

• Leer etiquetas y no escatimar en el jabón: más allá de prestar atención atentamente los avisos donde nos previenen sobre el maltrato de las prendas, no hay que usar jabones de mala calidad, ya que estropean las fibras naturales de nuestros abrigos.
• Evitar el centrifugado: este paso del lavado termina por deformar y, a veces, achicar la ropa por el estropeo de las fibras.

• Limón: añade el jugo de medio limón en el compartimento del jabón y no olvides el suavizante. De esta forma, tu ropa de invierno quedará impecable y siempre estará en su tamaño original.
• Evita el lavarropas y el agua caliente: usar la lavadora para los abrigos muy a menudo hace que se rompan las fibras, por lo tanto, terminan por deformarse y sus tamaños cambian. El agua caliente debe ser evitada.

• No planchar: no queremos promover la moda de las prendas arrugadas, pero si vas a planchar una prenda, hacelo con plancha a vapor. Evita el contacto directo del electrodoméstico con el abrigo.