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Adromischus: una suculenta fuera de lo común, que cautiva por su apariencia

La presencia de esta planta es tan llamativa que todos quieren conseguir un ejemplar.
sábado, 22 de abril de 2023 · 05:30

La suculenta Adromischus cautivará tu atención por tener hojas muy llamativas que parecen pequeñas esferas. Esta planta es endémica del sur de África, y si bien tiene una amplia familia, solo 28 variedades son aceptadas. 

Esta crasa crece en matas enanas y tiene hojas muy carnosas que pueden tomar una forma redonda cuneiforme o bien plana. De acuerdo a la cantidad de luz solar que reciban, será su coloración.

Sus hojas pueden llegar a medir hasta 5 cm de largo.

Si la suculenta Adromischus recibe demasiada luz, comenzarán a tener alguna coloración moteada; sus flores aparecen en el centro de la planta y la forma es de espiga.

Cómo cultivar suculenta Adromischus 

Suelo 

La suculenta Adromischus necesita un compost arenoso de drenaje libre para que pueda crecer en un espacio pequeño pero bien ventilado. Esta planta necesitará humus de lombriz para fortalecer su dosis de nutrientes. 

Los tallos producen numerosas raíces aéreas.

Luz

La suculenta se sentirá bien a gusto donde hay luz del sol, si la cultivás en interiores, deberás intentar que reciba luz al menos cuatro horas por día, para eso colocala en una ventana o en un balcón. 

Tené en cuenta que a mayor cantidad de sol, mayor cantidad de pintas de colores tendrán sus hojas. Si está en interiores, crecerá verde completamente. 

Temperatura

La planta es nativa del sur de África, está acostumbrada a climas templados, por lo cual deberás propiciar esa temperatura para su desarrollo saludable. 

Las flores son largas, estrechas.

Esta suculenta tolerará condiciones frescas y libres de heladas durante el invierno siempre y cuando no se extienda en el tiempo y el ambiente sea seco. 

Cuidá el follaje durante el invierno, si es necesario, guardarla en el interior.

Propagación 

Por su apariencia, se volvió una de las más buscadas.

La reproducción de estas suculentas se podrá llevar a cabo a partir de una sola hoja que debe colocarse contra el costado de la maceta de modo que el extremo del tallo toque el compost y así podrá enraizar y dejará caer sus hojas fácilmente cuando crezca. 

Cada hoja forma una nueva planta, de hecho es muy probable que la planta se reproduzca sola a medida que pierda sus hojas en el suelo.

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