Pechuga de pollo: el truco culinario para lograr una receta jugosa y atractiva

El pollo es una de las carnes más nobles, ya que permite ser preparado en numerosos platos, de muchas formas y es tierno, lo cual facilita muchísimo la degustación y la creatividad para las preparaciones más extrañas. Sin embargo, la pechuga de pollo suele ser más sosa.

Lo que sucede con la pechuga de pollo es que al momento de la cocción suele perder sus jugos y, pese al marinado, a las hierbas, a los complementos y a todo lo que se le agregue, la porción suele secarse y quedar insulsa.

En esta nota te enseñaremos una forma muy fácil para tener en cuenta a la hora de preparar pechuga de pollo y lograr que se cocine perfectamente, sin perder su jugosidad, y así poder presentar un plato como el que uno imagina antes de comenzar la receta.

Ingredientes para 2 personas

• 1 pechuga de pollo
• 75 ml de salsa de soja
• 75 ml de miel
• 15 ml de jugo de limón
• Pimienta negra molida a gusto
• Cebolla de verdeo para decorar
• Semillas de sésamo para decorar

Modo de preparación

• Realizá una marinada con la salsa de soja, la miel, el jugo de limón y un poco de pimienta negra. 
• Abrí la pechuga de pollo y pincelá bien con esta mezcla. Luego, enrollala sobre sí misma y envolvela con dos capas de papel film (que quede bien cerrada por todos lados).
• Calentá abundante agua en una cacerola y, cuando comience a hervir, introducí el rollo de la pechuga de pollo en su interior. 
• Cosé a fuego moderado durante 10 minutos, luego apagá el fuego y tapá, hasta que el pollo se atempere en el agua, durante 30 minutos. 

• Mientras tanto calentá el sobrante de la marinada en una sartén a fuego suave, hasta reducir a la mitad y lograr una salsa espesa. Sacá el pollo del agua y esperá a que se enfríe para retirar el envoltorio, así evitamos que te quemes las manos. 
• Laminá y pincelá la pechuga de pollo por todos lados con la salsa. 
• Serví frío o caliente. Podés espolvorear la pechuga de pollo con cebolla de verdeo o cualquier otra guarnición a gusto.

Guarniciones que le quedan muy bien a la pechuga de pollo 

Como dijimos antes, este corte de carne es uno de los mejores para un buen almuerzo o cena, ya que combina con casi todo lo que se te ocurra: desde un arroz blanco clásico hasta uno más preparado con azafrán y verduras.

Si querés darle más protagonismo al plato y a su presentación, podés optar por verduras a la plancha bien grilladas para otorgarle una variedad de colores y efectos atractivos a la vista. 

La ensalada también es un clásico, porque podés preparar un mix de hojas verdes con cherry y algún queso rallado en hebras. El puré de papas bien cremoso es tan versátil como la pechuga de pollo, por lo cual también podés preparar uno, decorarlo con nuez moscada por arriba y disfrutar de un plato caliente.

Tené en cuenta que todo esto no requiere tanto esfuerzo, son ingredientes accesibles económicamente y lograrán saciarte con un menú nutritivo y apto para la familia.