Mis suculentas crecen estiradas: por qué sucede y cuál es el truco para revertirlo

En el cultivo de las suculentas muchas veces ocurre algo que se llama etiolación, se trata de la deformación de un tallo o varios en la planta. Eso sucede por la falta de la iluminación natural, es decir, que ella crece en busca de la luz del sol.

En esta nota te vamos a enseñar lo básico para que puedas evitar que suceda esto con tus suculentas. El primer paso es conocer bien a las crasas que cultivas. En ese caso necesitarás saber cuál es el nivel de iluminación que necesita cada una si precisan el aire libre o bien una ventana simplemente.

Es un error garrafal llevar la suculenta a lugares muy oscuros, donde no hay llegada del sol, como la entrada de una casa o el baño. Tené en cuenta estos datos antes de ir de lleno a la nota. 

Cómo recuperar una suculenta etiolada 

Debés saber que una vez que tu planta perdió la forma original no podrás volverla a la forma compacta, pero podrás cortar esa parte etiolada con tijeras afiladas y desinfectadas para volverla a plantar en otra base con tierra húmeda y sustrato. Recordá dejar algunas hojas para que la planta pueda captar la luz del sol y respirar.

La planta madre, si conserva la forma de roseta, deberá permanecer en un lugar donde reciba luz del sol. Procurá que esté en una ventana o en un balcón, terraza o bien en el jardín donde la luz sea filtrada por la sombra de otras plantas; de esa forma recibirá la iluminación que necesita para crecer con su forma original.

Al cabo de unas semanas verás que la planta continúa su crecimiento normalmente y si tiene nuevas ramificaciones o rosetas lo hará sin perder hojas o sin sufrir deformaciones.

Los cactus también sufren

Así como la suculentas y todas las plantas que podemos tener en los sitios de interior pueden tener esta tendencia a crecer hacia un lado más que para el otro, en los cactus sucede lo mismo.

La deformación se debe justamente a la falta de iluminación natural, por lo tanto podrás corroborar que se tuercen para un lado o bien, que pierden la forma cilíndrica natural de las cactáceas. 

Iluminación desde una sola dirección 

En el caso de que este sea el factor por el cual el cactus termina etiolado, deberás girarlo periódicamente al igual que todas las plantas que tengas en interiores para que pueda crecer de forma pareja. 

Si tenés cactus cerca de ventanas, rotá la maceta sobre su propio eje cada cierto tiempo, tené en cuenta estos movimientos cuando vayas a regar la planta para que estés más atento. 

Falta de hibernación

Esta es otra de las causas por la cual en los cactus la etiolación también es un problema común. 

En las zonas invernales donde hay menos iluminación y las temperaturas son más bajas, los cactus entran en un periodo de letargo. Por lo tanto, si no se respeta este momento en su desarrollo, el cactus continuará en el intento de crecer y esta situación se convierte en algo poco favorable, por lo tanto tenderán a sufrir etiolación. Respeta el periodo de descanso de las plantas.