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Ñoquis de polenta: la receta perfecta para usar alimentos sobrantes y convertirlos en un gran plato
Esta preparación se destaca por ser suave, exquisita y única. No extrañarás la papa.La polenta es uno de los alimentos más característicos de toda Latinoamérica, pero también se consume mucho en países como Francia (especialmente en Córcega, Niza y Saboya), Italia, Suiza, Rumania, Eslovenia y muchos más. Es que esta harina de maíz es muy versátil en la cocina. Hoy, te traemos ñoquis de polenta.
La receta original de los ñoquis lleva papa y queso, pero en esta ocasión la idea es que puedas reciclar los alimentos sobrantes y sabemos que la polenta es como el arroz: muchas veces hacemos de más. Los ñoquis de polenta tienen una ventaja: no llevan papa y son muy suaves.

Ingredientes para los ñoquis
- 300 g de polenta cocida
- 1 huevo
- 1 y 1/2 taza de harina 0000

Ingredientes para la salsa
- 1 y 1/2 cebolla
- 1/2 pimiento rojo
- 1 diente de ajo
- 1/2 zanahoria rallada
- 250 g de puré de tomates
- 500 cc de agua caliente
- 1 hoja de laurel

Modo de preparación
- Desarmá con la ayuda de un tenedor o pisapapas toda la polenta cocida en un bol. Agregá huevo, sal, nuez moscada y todas las especies que te gusten, y mezclá bien.
- Cuando no haya pedacitos de polenta sin deshacer, agregá la harina e integrá perfectamente todos los ingredientes. Verás que queda una pasta pegajosa.
- Amasá en la mesada previamente enharinada y armá tiras de masa para formar los ñoquis de polenta.
- Si notás que la masa está muy pegajosa y es difícil de trabajar, agregá un poco más de harina, pero evitá pasarte, porque quedará muy seca y dura.
- Cortá los ñoquis de polenta y pasalos por la ñoquera, para darles la característica forma.
- Poné a hervir agua con sal en una cacerola grande y una vez que rompa hervor añadí los ñoquis de polenta.
- Cuando floten, retiralos y dejalos en una fuente con una base de salsa fileto.
- Servilos calientes con queso reggianito, parmesano o el que más te guste.

Preparación de la salsa
- Prepará una base de aceite de oliva en una sartén y esperá que esté caliente. Luego, agregá cebolla y el pimiento picados en brunoise y esparcilos para dorar un poco. También sumá el ajo finamente picado.
- Agregá la zanahoria rallada, un par de ramas de albahaca o salvia y, por último, los tomates triturados con una pizca de sal y el laurel. Cociná esta salsa durante 30 minutos a fuego medio o hasta que la zanahoria esté cocida.