MANCHAS
En solo minutos: el increíble truco que elimina las manchas en las trenzas de tus zapatillas
Si estás buscando una solución para que vuelvan a relucir tus calzados, acá te dejamos el paso a paso.Muchas veces, las manchas de las zapatillas son difíciles de sacar, sobre todo si se trata de aquellas que se alojan en los cordones y no salen con facilidad. Por eso, queremos contarte cuál es el truco más fácil y rápido que te permitirá volver a tener tus calzados como si fueran nuevos.
Para poder quitar de una buena vez las manchas que están en tus trenzas, seguí este paso a paso y sorprendete con los increíbles resultados:
1. Retirá los cordones de las zapatillas para más comodidad:
A pesar de que parece algo evidente, es fundamental para que puedas lavarlos de la mejor manera. En muchos casos, se opta por lavar en conjunto el calzado y su cordón, lo cual no es recomendable, ya que produce roturas y desgarros. Por otro lado, si solamente querés limpiar los cordones, resultará mucho más sencillo si los quitás del zapato.

2. Cepillar:
Luego del primer paso, lo que debés hacer es proceder a cepillarlos. De esta manera, les vas a eliminar la suciedad superficial, el polvo y las partículas incrustadas en los cordones. Hay dos maneras: utilizando las manos o, mucho más efectivo, con un cepillo. Por ejemplo, podés usar un cepillo de dientes: es ideal porque se adapta perfectamente y resulta muy manejable.
3. Solución limpiadora:
Para conseguir resultados más eficaces, lo primordial sería que realices tu propia mezcla, ya que hay grandes diferencias entre cómo lavar cordones blancos y de color. Si los cordones son blancos, la mezcla debe consistir en blanqueador o lejía, agua y jabón o detergente. No obstante, en el caso de que sean de color, no introduciremos el blanqueador. En ambos casos, es mejor si el agua está caliente, ya que elimina con más facilidad la suciedad.

4. Lavado:
Lavar los cordones con la solución limpiadora preparada en el paso previo. Para los cordones blancos, lo ideal es introducirlos dentro de una bolsa hermética y removerlos en el líquido varios minutos. Recordá que si contiene blanqueador o lejía, deberás utilizar guantes de plástico, para evitar su contacto con la piel y posibles irritaciones.
Si los cordones son de color, podés utilizar las manos directamente para introducirlos en el agua y asegurar que se remojen por completo. Para que la suciedad se desprenda más fácil, es importante frotar con la ayuda de las manos o con un cepillo pequeño.
Siempre tené cuidado con el herrete, la punta de plástico del cordón, porque, de recibir una fuerza brusca, puede romperse, pero también debe ser tratado y limpiado. Si la suciedad continúa, se puede volver a repetir el proceso de lavado.
5. Secar:
¿Cómo secarlos? Lo ideal es que sea naturalmente, con al aire, por lo que se pueden colgar en un tendedero o sobre una soga. Si decidís utilizar la secadora, tené en cuenta que puede encogerse, según del material que sea, y el herrete puede dañarse; además puede alterarse la elasticidad del cordón. Por eso, te recomendamos esperar, seguro valdrá la pena. ¡A por ello!