Alfombras
Dejá tus alfombras como nuevas con los ingredientes caseros más económicos y fáciles de conseguir
Te damos los mejores trucos hogareños para que tengas tu casa reluciente sin gastar dinero.Las alfombras suelen ser un clásico y están presentes en muchísimas casas de todo el mundo, pero se convierten en un dolor de cabeza a la hora de su limpieza. Cabe mencionar que la historia de este tipo de tapetes se remonta a tiempos antiguos y se ha desarrollado en diferentes culturas a lo largo de los siglos. Las primeras evidencias de este tipo de tapices datan de civilizaciones antiguas como los egipcios, persas y sirios.
Estas primeras alfombras estaban tejidas a mano con materiales naturales como lana y algodón, y a menudo presentaban diseños geométricos y simbólicos. Durante la Edad Media, los tapetes continuaron siendo símbolos de lujo y estatus social. Las alfombras orientales, especialmente las persas, eran altamente apreciadas en Europa y se convirtieron en objetos de comercio y regalos entre naciones.
Con la llegada de la Revolución Industrial en el siglo XVIII, las técnicas de fabricación de alfombras comenzaron a cambiar. Se introdujeron métodos de tejido mecánico, lo que permitió una producción más rápida. En la actualidad, los tapices son un elemento común en hogares y espacios comerciales en todo el mundo. Se fabrican utilizando una variedad de técnicas, desde el tejido a mano tradicional hasta la fabricación en masa utilizando maquinaria avanzada.
Limpiar una alfombra con ingredientes caseros puede ser efectivo para eliminar manchas y olores leves. Aquí tienes algunos métodos que puedes probar:
Bicarbonato de sodio para eliminar olores:
- Espolvoreá bicarbonato de sodio sobre la alfombra.
- Dejá reposar durante al menos 15-20 minutos para que el bicarbonato de sodio absorba los olores.
- Aspirá el bicarbonato de sodio con una aspiradora potente.
Vinagre blanco para manchas y desinfección:
- Mezclá partes iguales de agua y vinagre blanco en un rociador.
- Rociá la solución sobre la mancha, pero no empapes demasiado la alfombra.
- Dejá actuar durante unos minutos y luego limpiá con un paño limpio.
- Secá bien la zona tratada.
Detergente líquido suave:
- Mezclá una pequeña cantidad de detergente líquido suave (sin blanqueador) con agua tibia.
- Humedecé un paño limpio en la solución y frotá suavemente la mancha.
- Enjuagá el área con agua limpia y luego secá bien la alfombra.
Pasta de bicarbonato de sodio y agua:
- Mezclá bicarbonato de sodio con agua hasta obtener una pasta espesa.
- Aplicá la pasta sobre la mancha y dejala secar.
- Raspá suavemente la pasta seca y luego aspirá cualquier residuo restante.